"Gran locura femenina en el mundo astral" parte 6

Colaboracion con Elizabeth


Edward se fue a dormir bastante temprano, se quedo pensativo por unos instantes por lo que le habia pasado hoy, su tía habia inventado una maquina astral y se habia metido en su cuerpo, negó con la cabeza e intento dormir un poco ya que al día siguiente tenia un examen. Cerro los ojos e intento dormir. En el desván Samantha estaba retocando su maquina de viajes astrales. Suspiro sonrió al ver que habia conseguido que su maquina fuera hasta mas portátil de lo que era la original. La cogió y pensó en alguien para usarlo, se froto la barbilla pensando en su sobrino. Fue al cuarto de su sobrino y le puso todo los dispositivos por su cuerpo. Edward vio ese camino astral, pero como estaba durmiendo pensaba que todo aquello era eso un sueño. Comenzó a flotar por su cuarto, comenzó a flotar por su cuarto y vio el cuerpo de su madre en su cama, todo en colo ocre, veía que su nivel era perfecto para entrar. El chico se metió en el cuerpo de su madre poco a poco. En la misma habitación estaba Samantha ya que habia creado unas gafas para ver los seres astrales y comenzó a grabar como Edward entro en el cuerpo de su hermana mayor:

-Ja, pervertido el cuerpo de tu madre….

Edward se despertó en el cuerpo de su madre y sonrió, ya que pensaba que todo aquello era un sueño, se levanto y se quito el pijama, vio el cuerpo desnudo de su madre, era perfecto, era bonito.

-Esto es un sueño y si entro en el cuerpo de mi madre no sera raro, solo es un sueño.

Erica se miro los dedos sabiendo que sus orgasmos serias increíbles, recordaba que al tocarse o hacerlo con su tía casi explotaba, pero era un sueño y tener un gran orgasmo con su madre no era raro, todo era un sueño. Se lamió los dedos y se comenzó a masturbar, con tanta pasión, con tantas ganas que le temblaban las piernas. Ella se tiro en la cama por que sentía que explotaría. Comenzó a gritar sin cesar. Cuando estaba apunto de explotar dio un golpe a una de las mesitas de noche y dentro descubrió un consolador, ella sonrió:

-En mis sueños mama es una guarra….

Cogió el consolador y al usarlo con tantas ganas, con su cuerpo tan sudado que al fina derritió el consolador entre sus piernas. Samantha sonrió al ver aquello y siguió grabando.