La Familia Ideal (Historia de fin de año) parte 5

Historia de Dexter

 Capítulo 5

Curiosidad

Pasaron todo el día platicando sobre la escuela y el trabajo, pero se habían dado cuenta que sus respectivos cuerpos tenían recuerdos que cobraban mayor sentido poco a poco, pero Adrián (T) dijo:

-Ups, casi se me olvidaba, recuerdo haber leído en algún libro de la abuela que cuando ocurre un cambio de cuerpo no se puede quedar embarazada o embarazar a una mujer, y aparte no se pueden contraer enfermedades de transmisión sexual. Creo que era porque nos rodea una aura de protección.

-Dos presiones menos -dijo Sofí (J), con una sonrisa.

-¿Entonces es cierto que podemos hacer lo que queramos? -pregunto Jaime (S) muy sorprendido y algo excitado.

-Claro, pero con cuidado y discreción -puntuó Sofí (J)- Además como ya no somos “esposos” tenemos un año libre para estar con quien queramos.

-Aja -confirmó Adrián (T).

-Pues que Open Mind me salieron, hijos -dijo sorprendido Jaime (S).

-Aunque aún tendremos que ir a la escuela y estudiar, pero no será problema.

Mas tarde.

-Ufff, ya quiero verme -dijo Sofí (J) para sus adentros.

Entro al baño de su recámara, y se miro en un gran espejo, sus pechos eran pequeños pero firmes, y eso que no se había vuelto a poner el sostén, se los acarició por encima de su blusa blanca, abrió el grifo y se mojo las manos y se acaricio los senos, lo hizo hasta que su blusa estaba completamente mojada de la parte del busto, sus pezones duritos se marcaban y transparentaban a través de la blusa, le dio frio, así que se la quitó y pudo ver sus senos, aquellos pezoncitos rosas eran adorables, se sentían como tener dos prepucios en el pecho. Sus facciones eran delicadas y preciosas, sus ojos color miel estaban adornados con unas pestañas muy coquetas y delineador, una boquita suave y rosita, su cabello largo castaño le enmarcaba la cara. La ternura y belleza encarnada. Comenzó a hacer caras graciosas, tipicas de la vieja Sofía, hincho sus cachetes y puso los ojos bizcos, sacó la lengua y miró a la izquierda, hizo cara de enojada y le parecio muy extraña ya que la vieja Sofí nunca lo estaba. Se acarició la cara y se metió el dedo indice y medio de la mano derecha a la boca, y succionó con fuerza y siendo lo mas provocadora que pudiera, se los metió hasta el fondo y pudo tocar su úvula, un repentino sentimiento de asco se apoderó de ella, pero la exitó como nunca se sintió de hombre (bueno, solo una vez cuando estaba en una fiesta de universidad y 2 chicas deseaban probar cuango tiempo aguantaba una felación por parte de las 2). Respiró hondo al sacarse los deditos de la boca, y un hilo de saliva le salió por la comisura de los labios, respiraba agitada y con emoción.

Se untó la saliva en sus pezones que habían vuelto a la normalidad y se fué recorriendo hacia la aréola sobando los pequeños granitos que llacen ahí. Saltó y meció los senos de su hija, pero eran pequeñitos,  a el le gustaban mas grandes y con pezón un poco café, pero estos eran perfectos, cómodos y se sentian asombrosamente bien.

Le entraron ganas de orinar, así que se bajó el pantalón y cuando se hiba a bajar las bragas (que palabra mas chistosa) recordó como lo hacían las mujeres, así que se las bajó lentamente de lado a lado moviendo la espectacular cadera que la natación le proporcionó a su hija, y se sentó en la taza, joder que fría estaba, hasta dió un saltito del susto, hizo una mueca y se dejó ir, cuando terminó procuró limpiarse muy bien de adelante hacia atrás.

No se volvió a subir los pantalones, en cambió una mirada picará se apoderó de ella y gritó:

-¡Papá, tu viejo cuerpo apesta a perro de la calle, me voy a bañar!

-Como quieras, nomás no uses el shampoo verde porque hace que se me caiga el cabello 

-También gritó, mientras practicaba algo que ella denominó (despues de ver varios vídeos porno) "masturbación enojada", sentía un vació en el estomago, pero lo compensaba el peso de los enormes cocos de su papi lindo, chulo y querido.

Sofí (J) puso un balde de plástico vació para que cayera ahí el agua fría, es para mantener el ecosistema. Cinco minutos después estaba sentada en la taza del baño con los brazos cruzados, estiró la mano para sentir el agua, pero aún seguía fría y el balde medio vacío, al parecer el frío ambiente no dejó que el agua se calentara en el calentador solar, así que tendría que prender el boiler.