otra perspectiva capitulo 4

Capítulo 4: compromisos  

Aquí les traigo el capítulo 4 de otra perspectiva, perdón que se tardara tanto, tenía la intención de subirlo desde el jueves, pero estuvimos con evaluaciones y no me fue posible, aun así, espero ya sea mañana o el martes por la noche, subir ya sea o visitando a mis suegros o infectado, de acuerdo a cuál me resulte más fácil de publicar en el momento.

sin mas por el momento aqui les dejo otra pesrpectiva capitulo 4

Te invito a dejarme tu like cuando menos en los comentarios para que no tengas pena de comentar tan solo un bonito like espero muchas gracias.

Es sábado y aun no eh logrado progresos en mi misión de encontrar al chofer junto con la estatuilla que me convirtió en lo que ahora soy y como tal la única opción que me queda es aceptar la oferta de Luis el jardinero quien me dará la información a cambio de tener una cita con él.

Me levanté muy temprano esta mañana siendo que es sábado y ambos tendremos el día libre, me puse mi ropa de sirvienta siendo que de momento es casi lo único que tengo para ponerme y fui a las habitaciones del personal masculino de la mansión, aun me resulta difícil de creer lo diferentes que son estas habitaciones en comparación de la mí y las de mi familia, o más bien de mi vieja habitación y las de mi familia, ya que ahora eh sido rebajado a nada más que una simple empleada.

En fin, llegué a las recamaras de los empleados masculinos cuando encontré a los hombres descansado en su día libre y al verme de inmediato comenzaron a decirme. “hola preciosa, como esta muñeca.”

Uno de ellos incluso llego a extremo de palmearme el trasero, fue entonces que Luis apareció y me dijo. “como esta lindura, decidiste aceptar mi oferta de una cita.”

Entonces le dije. “si…. Pero solo si me dices done encontrar al chofer que estoy buscando.”

El contesto. “pues perfecto, tenemos un trato saldremos esta tarde, pero procura llevar algo más… sexy.”

Luego me sujeto mis glúteos y me dio una palmada mientras yo salía de su recamara sintiéndome completamente ultrajado.”

Ahora estaba el problema de tener que conseguir algo que ponerme, yo sabía que si no me ponía algo sexy, Luis seguramente se negaría a darme la información y no podía darme ese lujo, pero no tenia dinero y nuevamente supe que solo podía conseguir la ropa que necesitaba en un lado, con mi hija quien me consideraba prácticamente un caso de caridad, por la forma en que me encontró cuando llegue a casa con este cuerpo por primera vez.”

Fui a su recamara y le dije. “eh Sta. Anna, querría hablar con usted.”

 Ella me respondió. “hola maría, disfrutando de tu día libre.”

Yo no sabía cómo contarle que necesitaba un vestido y solo le dije. “bueno Sta. Lo que pasa es que tengo una especie de cita.”

Ella cambio su expresión y de inmediato comenzó asaltar diciendo. “oh quien es el chico, lo conozco, es apuesto verdad, una chica linda como tu debe tener a los chicos a sus pies.”

Yo respondí. “si… es muy apuesto.”

ahí me di cuenta… en verdad me parecía apuesto, yo detestaba al sujeto, pero baya que era atractivo, maldita sea lo que me hiso esa estatuilla.

Anna dijo. “¿oh que hermoso quien es el?”

Yo respondí. “es Luis, el jardinero.”

Ella respondió. “oh que dulce, bueno supongo que necesitas un vestido para verte sexy para tu cita así que mejor elijamos algo bueno.”

Yo le dije. “¿podría ser algo muy revelador?”

Pero Anna dijo. “oh linda, con un cuerpo como el tuyo tienes que mostrarlo, créeme lo que digo, si lo haces tendrá a Luis suplicándote por ser su novia.”

Esto se ponía cada vez más difícil de sobre llevar, pero así luego de una hora de bañarme, vestirme, peinarme y demás tratamientos finalmente estuve listo para la cita.

Salí al jardín a encontrarme con Luis y ahí mismo Anna me dijo. “oh dios este es mi mejor trabajo quedaste fabulosa.

Yo pregunte. “¿realmente eran necesarios los tacones, apenas y puedo caminar con estas cosas?”

Pero Anna solo dijo. “oh si definitivamente ya viste lo sexis que hacen lucir tus piernas, ¡oh…! como desearía tener un cuerpo tan sexy como el tuyo.”

Me pareció irónico que dijera eso considerando que yo encantado le daría este cuerpo, aun así, no podía decirle nada, literalmente por culpa de esa maldita estatuilla no podía decirle nada a nadie de lo que me paso, pues cada vez que trataba de explicar solo terminaba, refiriéndome a mí mismo como María.

Ya vestido me dirigí a las habitaciones de los empleados a encontrarme con el miserable de Luis, para terminar rápido con esta tontería de la cita.

Pero al verlo me di cuenta de que él estaba vestido con un traje, no muy caro, pero si muy bien cuidado, y sorprendentemente me encontré a mí mismo dando un pequeño gemido de excitación, algo parecido a lo que me paso cuando tuve sexo con mi hijo, sorpresivamente estaba encontrando atractivo este tipo, pero por supuesto jamás lo admitiría frente a él.

Fue entonces que él dijo. “estas preciosa.”

Entonces sentí como se me debilitaban las piernas por ese pequeño alago, mi condición era peor de lo que creía, tenía que recuperar mi antiguo cuerpo y pronto.

El me llevo a las afueras de la mansión donde estaba uno de los autos de la casa.

Yo de inmediato le dije. “vamos a ir en eso, ese no es tu auto, quieres que te despidan.”

El respondió. “así que te preocupas por mi preciosa, descuida como ya sabes soy amigo de los choferes y esta familia son tan ricos que no creo que noten que uno de los autos desapareció por un par de horas.

En verdad tendría que despedir a este idiota tan pronto como recuperase mi cuerpo.

El entonces me abrió una de las puestas del auto y me dijo. “señorita.”

Quien diría que este bobo tendría modales, bueno supongo que no podía ser tan atrasado como parecía este cavernícola.

Entre al auto a regañadientes solo queriendo terminar con este asunto lo antes posible, donde el de inmediato me quiso hacer la plática. “perdona por tratarte tan rudamente en la mansión, pero mis compañeros están acostumbrados a esa clase de actitudes y si me comporto de otro modo jamás me dejaran olvidarlo.”

No podía creerlo, en verdad este sujeto decía que todo lo de nalguearme era solo un acto, pero yo no caería en su juego tan fácilmente y le respondí. “pues no creo que de verdad seas mejor que ninguno de esos espaldas mojadas.”

El detuvo el auto cuanto antes y dijo. “en verdad no te entiendo, eres muy linda, y si no te trate bien antes, pero no puedo creer que te refieras así a tu propia gente.

Yo le respondí. “ellos no son mi gente son solo un monto de mexicanos.”

El contesto. “¿¡te has visto en un espejo últimamente!?”

Me vi por un segundo en el espejo retrovisor y en verdad yo era una mujer mexicana, pero no planeaba permanecer de ese modo por mucho tiempo y le dije. “sí, soy mexicana al menos físicamente, pero no conozco nada acerca de los mexicanos y no me interesa conocerlo.”

Él lo pensó por un segundo y dijo. “por lo que dices supongo que solo has convivido con extranjeros toda tu vida, así que creo que bien podríamos convertir esta cita en una oportunidad para el asunto descubrimiento.”

Yo le dije. “has lo que quieras, solo terminemos con esto rápido.”

Al final me llevo a lo que parecía ser un restaurante mexicano por lo que pensé, solo faltaba que me trajera a comer la comida local, como si mi situación no fuera lo bastante mala.”

Él dijo. “te noto algo molesta linda.”

Yo le respondí. “no quiero comer aquí.”

Pero él dijo. “solo dale una oportunidad, es tu cultura después de todo.”

Tomamos asiento y una de las camareras vino a tomar nuestra orden, yo solo iba a pedir agua embotellada, cuando Luis dijo. “queremos medio kilo de surtida, por favor.”

Ahora me preguntaba que era lo que este tipo me iba a obligar a comer, no podía pensar algo que fuera peor que este momento.

Cundo entonces comenzó a sonar una canción, y el de inmediato me dijo. “bailas preciosas.”

Yo no quería bailar, pero supuse que si me negaba no me entregaría los datos que yo necesitaba así que acepte bailar con él.

La música era muy rápida y continuamente requería que me le pegara, yo me sentía avergonzado de estar bailando frente a toda esta gente, sobre todo porque muchos de los hombres en el lugar no dejaban de ver mis piernas, mi escote y mi trasero los cuales podían ver muy claramente con este vestido que llevaba puesto, pero sin darme cuneta algo se apodero de mí, no sabía como pero de repente me encontraba moviendo las caderas, al ritmo de la música, yo giraba y me contoneaba como si deliberadamente quisiera atraer a los hombres en el lugar, pero lo más extraño era que estaba comenzando a disfrutarlo, la música era rítmica e intoxicarte, las luces, el ambiente, todo se estaba mesclando y por algún motivo me estaba divirtiendo como nunca en mi vida, hasta que finalmente exhaustos tomamos asiento.

Fue entonces que Luis me dijo. “tranquila, si no tienes cuidado juraría que estas empezando a divertirte.”

Yo no quería admitirlo, pero le respondí. “admito que no está resultando tan mal como crei que sería esto.”

Entonces nos trajeron la comida que Luis había ordenado, y parecía ser solo un montón de carne y una tortilla. Con una especie de salsa varias.

Luis dijo. “tienes que probar esto.”

Yo no quería tener que comer la comida que servían en este lugar, pero Luis seguía insistiendo hasta que accedí a probarlo, y nuevamente fue como una revelación, no sabía que era esta comida, pero tenía más sabor que cualquier cosa que hubiera probado en años.

Luis dijo. “veo que te gusto.”

Yo no sabía si era por el efecto de lo que me hubiera pasado, pero en verdad estaba disfrutando la cita, e incluso accedí a seguir bailando con Luis en cuanto terminamos de comer.

Fue entonces que Luis me llevo a la playa, yo ya había visto el mar, pero esto era completamente diferente, el clima, las olas, todo se veía hermoso y fascinante, fue en ese momento que me di cuenta, tal vez este país no era el infierno que yo creía.

Luis y yo caminamos pro la playa por lo que debió ser una hora luego de lo cual me llevo de regreso a la mansión.

Estábamos solos en la cochera de la casa y una vez allí dijo.  “bueno preciosa, espero que te hayas divertido, porque yo me la pase fantástico, en cuanto cambiaste de actitud claro, y aquí está mi parte del trato, en esta nota esta la dirección del chofer que buscas, solo tienes que ir allí y lo encontraras.”

Esto era lo que buscaba, al fin había dado el primer gran paso para regresar a la normalidad, pero algo era extraño por alguna razón no quería que esta noche terminara así, como un simple trato que se había cumplido, entonces me encontré besando a Luis, no sabía que estaba haciendo, pero no podía dejar de hacerlo, él se había comportado tan bien conmigo y con lo difícil que había sido mi vida desde que me transforme, la forma en la que él me había tratado parecía tan maravillosa ahora.

Tanto que en el momento le baje el cierre de los pantalones para descubrir su miembro, que al verlo lucia del doble del tamaño del mío de cuando era un hombre y mirarlo solo sentí excitación, yo quería lamerlo y chuparlo y de algún modo lo estaba haciendo sin poder detenerme.

Yo seguía chupando, excitándome más y más mientras lo hacía, yo solo podía pensar en tener su miembro dentro de mí.

No tenía idea de que fuerza era la que me hacía hacer todas estas cosas, ya que este era como el incidente con mi hijo, la sola idea de estar con un hombre era lago que ahora me excitaba y emocionaba, al tener la posibilidad de hacerlos, todos los demás pensamientos se esfumaban de mi mente, como si tuviera una mueva clase de instinto, que me obligara a hacer estas cosa pero no me importaba en lo absoluto, ahora solo quería estar con él, y mi antiguo orgullo masculino no valía de nada en este caso.

Pero solo chupar su miembro no era suficiente, yo lo quería todo de él, pero el espacio en el automóvil era limitado y no podíamos movernos con libertad.

Así que salimos del automóvil y nos dirigimos a la cajuela donde Luis me devolvió el favor que yo le había echo antes al lamer mi clítoris mientras yo jadeaba y gemía de placer continuamente, porque mi cuerpo de mujer parecía necesitar su atención desesperadamente.

No sé cuándo fue que me quite el vestido que tan renuentemente me había puesto en primer lugar, pero ahora Luis se había erguido en más de un sentido y del mismo modo que mi hijo lo había hecho anteriormente, él estaba listo para penetrarme y hacerme suya y yo no mostraría la más mínima resistencia al respecto, era más, mucho más que simple excitación, yo quería que me diera su semilla, yo tenía el deseo de quedar embarazada y dar a luz a sus hijos, incluso fantasee sobre quedarme para siempre como una mujer mexicana y formar una familia, cocinar para mis niños y complacer a mi esposo por las noches, fue entonces que Luis eyaculo dentro de mí.

Pero yo no estaba satisfecho, yo quería mas y así como así de mi cuerpo comenzó a brotar una especie de humo blanco muy claro, casi transparente que el contacto con la piel de Luis y hiso que su miembro se irguiera nuevamente, teniendo un efecto mui parecido a lo que me había echo la estatua, pero ahora tenía el efecto opuesto en Luis al reforzar su hombría permitiéndole cogerme nuevamente, por segunda vez, y con más intensidad que la anterior, levantándome incluso del suelo, solo para seguir llenándome de esperma nuevamente.

Al final exhausto y satisfecho del sexo que acababa de tener ya siendo capaz de pensar nuevamente con claridad pensé. Qué demonios acabo de hacer, esto es una pesadilla y lo peor es que no se si quiero que se repita.

Parecía ser que mi reciente actitud tenía que ver en algo con la estatuilla que me había convertido en esto, por lo cual ahora que tenía la dirección del chofer, tendría que averiguar un modo de recuperar la estatua y con elle mi antiguo cuerpo, pues este cuerpo me estaba haciendo sucumbir mucho más rápido de lo esperado.

Fin del capítulo 4.