¡Viejo Pervertido!

¡Viernes de Saga Caps!

Me encontraba en el cielo, por alguna razón me había dado un infarto, mi viejo cuero ya no era tan fuerte para resistir mi adicción a masturbarme, aunque no había hecho cosas malas no era mi tiempo para morirme justo cuando vi la luz blanca decidí rechazarla y me aleje dejando que se cerrara el agujero que me llevaría al cielo o quien sabe a qué lugar que quizás no me gustaría, aun con el dolor de dejar mi vida, me salí de mi casa buscando ayuda o ver que podría hacer, lo primero que se me ocurrió fue espiar a mis vecinas, sobre todo a mi vecina buenota que  gustaba tanto, ella era Adriana tenía ya sus 23 añotes pero estaba bien buena, con un culazo redondito y sus piernas carnosas que me hubieran encantado abrir para meterle mi miembro hasta hacerla gemir y gemir del placer, se podría decir que ella tenía un cuerpo perfecto, pues además de sus buenas caderas, su cintura no era para nada despreciable, la topa se mantenía en forma y por si fuera poco subiendo más arriba podrías encontrar unas chichotas del tamaño de unos melones, además no era fea sin duda tenía un cuerpazo que me hubiera encantad cogerme, precisamente estaba pensando en el a aun en mis últimos suspiros cuando exhale el ultimo hasta verme fuera de mi cuerpo notando que había muerto, me acerque a la chica mirando por la ventana, un regalo divino obtuve de eso pues ella se estaba bañando, la miraba desnuda y como deseaba tener m pene para poder jalármela mientras la veía, tener mis manos para tomar mi celular y tomarle un video o un par de fotos así de encueradita como estaba, pero bueno, al menos podría verla más de cerca sin que nadie me dijera nada como “Viejo pervertido o cosas así”, me metí al baño junto con ella en la regadera mirando cómo se enjabonaba, si tan solo tuviéramos manos para acariciar su cuerpo mientras tenía el jabón encima, luego de eso se terminó de bañar y salió del baño para secarse, me excitaba tanto verla desnuda mientras el agua escurría por todo su cuerpo, desde sus tetas hasta su culo y vagina se veía tan sexy.

Me estaba excitando mucho con su figura y la intensidad del momento que me deje llevar, fue entonces que me acerque a ella intentando tocar sus grandes tetas pero en eso sentí una especie de salto que me dejo confundido hasta que sentí un par de tetas rebotando por todos lados colgando de mi  pecho, en ese momento salí rápidamente del cuerpo de la chica sorprendido, pude ver  como ella reaccionaba confundida intentando despejar su mente, pensé rápido en lo que había pasado y era que con mi nueva condición podía poseer cuerpos, inmediatamente me acerque a ella de nuevo y me metí en su cuerpo rápidamente note como un largo cabello se agitaba por todos lados sobre mi rostro mientras trataba de moverme y volvía a sentir ese aire fresco de estar vivo que estaba extrañando de hace nos momentos después de morir, fue cuando mire debajo de mi ese gran par de tetas que inmediatamente subí mis manos a ellas para acariciarlas, la sensación fue tan placentera que no pude dejar de hacerlo por un buen raro, sobre todo al sentir sus pezones erectos que al frotarlos solo me generaban más satisfacción, casi comienzo a explorar mi nueva vaginita cuando escuche un fuerte golpe de  la puerta del cuarto de la chica era su madre que tocaba y comenzaba a regañarla, me volví a salir de su cuerpo para que ella hiciera sus cosas y comencé a observar todo lo que hacía, desde cómo se vestía etc., luego vi cómo se fue a la universidad y que algunos hombres la veían en el camino, era algo de lo que todos hacíamos todo el tiempo acosándolas, pero en fin, ahora  estaba muerto y podía acosarla sin ser visto, pero pensaba en que había obtenido inclusive más que eso, también observe su comportamiento, ella siempre ha sido una chica difícil con los hombres aunque se ve que es muy divertida y relajada, también veía que le iba mal en la escuela así que pensando en todo ello pensé que era la persona indicada para tomar su cuerpo.

Con el tiempo los amigos de Adriana se hicieron menos tomando solo a los necesarios y algunos que frecuentaba a escondidas dándoles algún regalito de mi cuerpo, sabía que me veía  como una fácil pero solo cuando lo ameritaba, ya sea  para sacarle dinero a algunos  hombres o para cumplirles su pequeña fantasía a algunos niñatos adolescentes calientes buenos para nada que veían por ahí, les bajaba el escote y les dejaba ver mis grandes tetas, a veces me salía de su cuerpo para descansar en ocasiones en el momento menos preciso y lo más divertido era  ver como reaccionaba al ver que un par de niños manoseaban sus tetas, una vez inclusive mientras tenia sexo con un hombre mayor por dinero comenzó a llorar, tuve que intervenir porque si no me arruinaría el negocio aunque a decir verdad el tipo también me había causado asco, mejore sus calificaciones y no por mi cuerpo si  no porque entendía mejor que la muy estúpida  conceptos tan básicos y fáciles en las materias  y ahora estaba luchado por conseguirle un buen trabajo a  esta buena para nada aunque lo más seguro era que yo terminaría trabajando por ella para que no la cagara me sentía y muy dueño de su cuerpo y sus amigas veían que su actitud era otra, en ocasiones perversa y otras más decente consigo mismas, pero bueno fui muy joven para  morir y muy grande para tener la experiencia necesaria para vivir correctamente en este mundo, nunca pensé ser una chica como está pero ciertamente me ha traído grandes lujos, como estas preciosas tetas y el culazo que me cargo, francamente estoy bien buena, aunque no dejo de sentir como Adriana lucha por recuperar el control de su cuerpo pues sabe bien todo lo que le he hecho desde que me he  adueñado de su cuerpo.