Robo de cuerpo mortal

-¡Lo siento nena!, pero tu cuerpo siempre me ha gustado desde que vi una foto tuya por primera vez –decía July mientras acariciaba las tetas de Diana, levantando su vestido quedándose tan solo en lencería, sujeto sus senos sacudiéndoos de lado a lado disfrutando del rebote dentro de las copas de su sujetador mientras pasaba sus manos acariciando sus torneadas piernas y su nuevo sexo, la pobre Diana se encontraba en el cuerpo del chico tirada en la cama sin poder hacer nada ateniéndose a mirar con asco y repulsión lo que el maldito cerdo del cual había confiado hacía con su cuerpo, -¿Qué pasa, te comió la lengua el gato?…¡Jajaja!… -decía July sínicamente escuchando la dulce y tierna voz de Diana saliendo de su boca, se bajó su panti dejando descubierta la vagina de Diana y tomo la mano de su ex cuerpo sin movimiento colocándola sobre su vagina obligando a Diana a manosear lo que era su sexo, -¿Te gusta bebe?, se siente muy rico cuando siento tus dedos sobre mi vaginita mojada –July asentía mientras esbozaba una sonrisa perversa en el rostro de Diana usando su mano contra su sexo, luego de manipularla un rato noto que su miembro aun a pesar de la circunstancia estaba erecto, la nueva Diana gimió levemente expresando un ligero orgasmo, se giró de frente notando la intensa mirada enfurecida de sus antiguos ojos los cuales expresaban el odio que Diana sentía sobre July, la chica asintió, abrió sus piernas enfrente del rostro de Diana mostrándole lo que  estaba a punto de hacer, tomo con sus manos su ex miembro frotando su sexo contra el miembro de Diana hasta que su vagina quedo completamente lubricada, poco a poco comenzó a introducir el pedazo de carne palpitante y caliente dentro de su sexo experimentando una fuerte sensación, July se sacudió meneando su cuerpo hasta que su ex miembro penetro completamente su nueva vagina, se incorporó ágilmente sobre su ex cuerpo y comenzó a montarse a sí mismo saltando una y otra vez hasta hacer venir ambos cuerpos.

-¡Oh Dianita, que rico!, eres una niña mala, este cuerpo es muy caliente y tú lo sabias, ahora no puedo dejar de penetrarme y sentir tu nueva rica polla dentro de mi sexo –July le ronroneaba en la oreja a Diana mientras que la obligaba a poner sus manos inútiles sobre sus pechos luego de liberarlos del sujetador, ambos se encontraban en un punto de éxtasis aún más July quien tenía el cuerpo lleno de orgasmos que provocaban las tetas y la lasciva vagina de Diana, pronto July experimento una carga intensa dentro de su cuerpo, el miembro de Diana había liberado su lechita dentro de su ex cuerpo, July jadeo del placer, tomo sus tetas brincando sobre Diana dejando escurrir los fluidos seminales y vaginales que desprendían de su vagina, levando uno de sus senos y los chupo con fuerza exprimiendo su pezón erecto, sacudió su cabeza de lado a lado zarandeando su cabello teñido de pelirrojo, luego le dio un intenso beso a su ex cuerpo haciendo crecer aún más el odio de Diana por July, se levantó de Diana y se limpió su sexo en el baño, luego de eso justo antes del atardecer y de que su madre llegara  del trabajo, July se despidió de Diana son una sonrisa malévola, -¡Adiós July, gracias por el cuerpo! –July salía con su maquillaje, su peinado y su vestimenta desarreglada dejando ver a Diana como toda una puta pervertida mientras que la pobre Diana se quedaba llena de rabia sin poder hacer nada con un cuerpo inútil por el veneno que July había puesto en su cuerpo antes del cambio, July y Diana se habían conocido en internet, con el tiempo se habían vuelto grandes amigos, Diana siempre le pidió ser honesto pues para ella la confianza lo era todo tratándose de dejar que alguien sobre todo un chico la conociera al volverse su amiga, pero July llevo las cosas muy lejos cuando Diana por fin acepto verse en persona, July sabía que era su oportunidad, le pidió que se vistiera con ello más bonito que tuviera, que se arreglará como una princesa y al encontrarse, llevo a Diana hasta su casa bebiendo un poderoso veneno paralizante el cual dejaría su cuerpo totalmente inmóvil de por vida, luego de platicar un rato July sentía que el veneno hacia efecto en su  cuerpo, justo en el momento preciso tomo la mano de Diana colocándole un extraño anillo provocando un destello el cual ocasiono que ambos cambiaran de cuerpo, cuando Diana se dio cuenta de que July le había robado su cuerpo ella se sintió verdaderamente mal, Diana termino desmayada sobre el suelo apenas mirando con las fuerzas que le quedaban como July acariciaba sonriendo felizmente su nuevas tetas, cuando ella despertó no podía hacer nada, July se había salido con la suya y ahora no había vuelta atrás, quería odiarlo con todo su ser, por romper la confianza que le había concedido, por jugar con sus sentimientos y sobre todo por robarle algo más que su propio cuerpo.