El viaje del remoto 60

Créditos
https://swappinggrounds.blogspot.com/2016/07/the-remotes-journey-60.html?m=1

A Marissa le dolía todo el cuerpo mientras yacía sobre la hierba. En unos momentos, su viejo cuerpo se inclinó sobre ella. "Marissa, tienes que ponerte en marcha ahora", siseó Tyler con su voz de niña. "Me estás haciendo parecer un maldito tonto." Inclinó la cabeza hacia arriba y usó sus grandes manos para frotarse la cabeza calva, "Lo estoy intentando, entrenador Williams, pero ¿vio la forma en que vino a cargarme?" Tyler puso los ojos en blanco y se apartó la desagradable melena de cabello de los ojos. "Sí, lo vi, pero eres su ENTRENADOR. Ahora eres un hombre y chillar como una niña pequeña mientras corría hacia ti era una maldita broma". Tyler se estaba maldiciendo por coger el mando a distancia en el hospital. Había un chequeo de rutina en su rodilla cuando encontró el control remoto en el piso. Llevándolo a la escuela, quedó devastado después de cambiar accidentalmente de cuerpo con uno de sus alumnos. Al no tener elección, Marissa tuvo que ocupar su lugar en la práctica de fútbol. Sentado con la espalda recta, Tyler ajustó los enormes pechos de su forma actual, "Jesús Marissa, ¿cómo lidias con estas cosas?" El ex negro les dio un apretón rápido, disfrutando de la humedad entre sus piernas comenzando de nuevo. Marissa se puso de pie, "De la misma manera que lidias con el monstruo en mis pantalones". Uno de los jugadores dijo: "¡Oye, Marissa! ¡Saca tu culo sexy de aquí para que podamos jugar! ¡El entrenador no quiere un pedazo de ti ... pero yo podría!" Todos los chicos se rieron y chocaron los cinco cuando la cara de Tyler se sonrojó, "Tengo que salir de este cuerpo. Marissa, solo hazme un favor, hombre y termina esta práctica. Luego podemos ir a buscar el control remoto y salir de la piel del otro. No tengo ninguna intención de engullirme como una niña blanca ". Cuando dejó su antiguo yo pasó a los jugadores. Uno de ellos, Jake, le dio una palmada en el trasero cuando pasaba. Tyler dejó escapar un grito y sus tetas rebotaron cuando saltó en el aire. Tyler se volvió hacia el chico en tono de indiferencia, "Serán 30 vueltas, idiota. Voy a recordar esto". Jake le dio una mirada curiosa. "No eres mi entrenador, perra. Además, sabes que te gustó". La cara de Tyler se calentó mientras miraba al chico. De hecho, le gustó un poco y su coño le decía que quería más. "Malditas horomonas adolescentes", maldijo, mirando su escote lechoso.