Buscando una estrella

 

Llevo días buscando esa maldita estrella, sé que debería de estar por aquí, no puede ser que no la encuentre, no creo que haya desaparecido, tengo que encontrarla, ¡No me puedo quedar atrapado en este cuerpo para siempre!, no quería ser una mujer, tampoco pensé que fuera real que una tonta estrella me concediera un maldito deseo, no niego que me encanta tener este sexy culo y un delicioso par de tetas que puedo tocar a mi antojo, pero eso solamente me ha traído muchos problemas, mi hermano mayor ahora me mira con sed de lujuria, ya no me ve con respeto y con el cario de hermanos de antes, ya no me invita a jugar futbol como antes y mi padre también dejo de considerarme para los fines de semana de futbol, me obligan a quedarme con mi madre cuidándome de que no me pase nada por culpa de mi ardiente cuerpo, tengo que actuar todo el tiempo como una señorita y vestirme como monja, por  eso aprovecho cuando estos a solas en mi cuarto para disfrutar de mi sexy cuerpo, pero necesito volver a encontrarme esa maldita estrella para recuperar mi antigua vida, mi vida de chico y no de una tonta niña ardiente a la que todos desean y le prohíben hacer todo lo que quiera.