¡𝑫𝒆𝒔𝒑𝒊𝒆𝒓𝒕𝒂!

 

Ximena estaba de camino a su casa mientras trotaba al hacer ejercicio, cuando de repente, un auto se acerco a su lado y un tipo comenzó a repetir palabras en un idioma extraño, cuando apenas pudo reaccionar, su cuerpo cayó desplomado al igual que el tipo dentro del auto, pero entonces, este choco en una barda en la calle.

- ¡Despierta, despierta despierta! – le decía el hombre que ahora tenía su cuerpo, mirándola desde arriba en su ahora posición de ella, tirada sobre el asiento mientras se recuperaba luego del cambio –¡Despierta!, tienes que largarte ahora, la policía viene por ti, gracias por el cuerpo, lo disfrutare mucho.

Ximena no sabia lo que pasaba, cuando apenas miro sus increíbles tetas frente a ella ahora siendo robadas por un desconocido, al ver que estaba atrapada en el cuerpo de un desconocido, del cual apenas podía moverse, la policía llegó y la sujetó como una vil criminal, con trabajo podía pronunciar algunas palabras sin dejar de sentirse torpe con su nuevo cuerpo, pero a pesar de que ella quería decirle a los policías que el tipo al que arrestaban había robado su cuerpo, este ya se había largado lejos y nadie le creería, comenzó a llorar mientras que era llevada lejos en la patrulla, siendo inocente de un robo que no cometió mientras que a ella le habían robado además su propio cuerpo.