Cuerpo de Rancho

 

- ¿Qué paso Don, no está a gusto con el dinero que le di? –

-Sí, pero no, no es eso lo que me tiene así, es solo que, no me gusta la manera en que trata a mi hija –

- ¡A chinga!, que no le gusta al Don, pero si este ya no es el cuerpo de su hija, ahora este es mi cuerpo, le ofrecí un shingo de dinero por él y bien gastado como podrá ver –

- ¡Sí!, pero, mi hija, me odia ahora, no me sirve de nada su mugroso dinero, está deshonrando a mi pequeña –

- ¡Jajaja, no me haga reír Don!, ahora lárguese de mi rancho que, si no lo mando a cortar en pedacitos, antes diga que no la violé antes de quedarme con su cuerpo, dese por bien servido con todo el dineral que se hecho a la bolsa viejo –

Ramón era un viejo agricultor al que su rancho le haba ido demasiado mal en los últimos años, él estaba a cargo de su esposa y su única hija Renata, quien le había saludo bastante bonita y era la adoración de todo el pueblo, pero la competencia de Don Ramón se lo había puesto más difícil y cada vez más se estaba quedando en la ruina, pero cuando uno de los capos del pueblo se interesó más en su hija, le ofrecío una suma muy grande de dinero para salir de sus deudas y se retirara a vivir bien, solo que el trato seria por algo más que llevarse a la cama a su querida  hija, si no a cambio de toda su belleza.