CAP 4
Los chicos estuvieron analizando diversas oportunidades para
infiltrarse en dicho edificio, no podían entrar las chicas dado lo peligroso
que pudiera ser para ellas, solo llevaron a Amra al lugar, ya era casi de media
noche pues así tendrían algo más de ventaja al descubrir cosas nuevas, todo lo
malo pasa en la noche pensaba Paty, las chicas bueno la chica y el ahora chico
se detuvieron para esconderse en un arbusto cerca del área del edificio, para
ver lo que sucedía con Amra, el chico con algo de nervios sintiendo
remordimiento y a la vez cobardía con
ganas de huir del lugar, regresaba la mirada para ver a sus amigas solo para
sentirse un poco a salvo que al ver los ojos de Paty brillando por esperar algo
bueno para su carrera y a un chico que no conocía pero que ahora era su amiga
esperando impaciente por recuperar su cuerpo,
dio un suspiro regresando en dirección a la puerta principal, un gran
portón negro con diversas decoraciones, antes de tocar la puerta Amra escucho
como desde adentro había un par de personas hablando así como se escuchaba un
poco retirado los esfuerzos de algunas chicas por tratar de huir, al menos eso
es lo que parecía al escuchar los extraños ruidos detrás de la puerta, que
hicieron pensar a Amra que el lugar estaba embrujado y solo escuchaba los
lamentos de almas en pena, con la mano temblorosa dio un pequeño golpe en la redada del portón,
inmediatamente dos hombres enormes
vestidos de negro con lentes oscuros aparecieron frente a él, analizaron al
chico que tenía frente, Amra quería escapar pero ya era
muy tarde, los hombres de negro tomaron al chico por los hombros antes
de que este pudiera decir algo llevándolo dentro del lugar cerrando el portón
sin dejar ver a la chicas lo que sucedía con su amigo.
-¡No puede ser!, se llevaron a Amra.
-Te lo dije Patricia, ahora perdimos a nuestro amigo, mejor
dejemos esto por las buenas y vámonos o podríamos hasta morir.
-No espera apenas entro Amra, tal vez, quizás no tarde en salir.
Las chicas esperaron pacientemente durante algunas horas para ver
si recuperaban a su amigo, mientras tanto, Amra era llevado por los hombres de
negro hasta la oficina de su jefe.
+Esperen por favor, que me harán, yo no hice nada lo siento, solo
tocaba para pedir hospedaje, estoy de visita en la ciudad y no tengo dinero
para un hotel.
-Silencio niño-decía una voz profunda y suave en la
oscuridad-Sabemos a qué has venido.
+¿Qué?, ¡No, no señor a nada lo prometo, por favor no me haga
daño!
-No te are daño, dime quien es la chica que deseas, a eso has
venido aquí ¿No es verdad?
+Bueno señor yo, soy Amra, la verdad había escuchado sobre un
grupo que lograba intercambiar cuerpos de personas, yo lo he escuchado por
varios rumores en la ciudad, pero no sabía dónde era, he vagado por días
buscando de sitio en sitio.
-No mientas niño, sabemos que te ha enviado tu amigo Erik, pues
ahora está en el cuerpo de una chica hermosa por cierto llamada Karla.
+Bueno yo, está bien escuche, la verdad es que estoy sentido con
mi ex, ella es muy caprichosa, estoy seguro además que me engaño, quisiera, no
sé, vengarme de alguna forma.
-Descuida niño, lo sé, permíteme, por favor firma estos papeles,
es para que aceptes la responsabilidad de lo que estamos por hacer, sin dejar
rastro alguno.
+Dios, no le hagan nada malo por favor.
-No te preocupes ya verás lo que podremos hacer, anota los datos
de la chica por igual, te gustara, será la mejor venganza para ti.
Una señorita vestida algo provocativa, se acercó a el chico con
unos cuantos documentos para el papeleo, le sonrió exclamándole una sonrisa
pervertida, está la mostro las tetas apretujándolas contra su rostro, le
acaricio con un dedo sus labios dejándolo
pasmado aunque a la vez algo excitado, comenzó a leer los papeles para
llenar el formulario, el chico no conocía a un a la persona oculta en la
oscuridad.
+Disculpe, ¿Puedo saber con quién estoy hablando?
-¡Oh no, niño te prometo que es de lo menos que te tienes que
preocupar por ahora.
La mórbida voz de aquel hombre puso nervioso a Amra, este ordenó
que iniciaran con el proceso, los hombres de aquel hombre salieron de su
oficina, tomaron las llaves de una vagoneta color negra y blindada, abrieron el
portón de la parte de atrás para salir tomando rumbo a la dirección de la
chica, mientras tanto, el jefe ordeno que alistaran al chico otros dos hombres
de negro aparecieron por detrás del chico llevándolo a una recamara, le dieron
algo de privacidad para que se desvistiera, se sentía mal, pensó que le harían
algo mano a Fany su exnovia, además pensaba que esto era una farsa y
terminarían quitándole los órganos a ambos para venderlos en el mercado negro,
además de que pensaba que tan fácil había sido la aprobación para lo que sea
que fuera a suceder, Amra termino de quitarse la ropa, en eso una enfermera algo
sexualizada entro a su habitación, este le hablaba con algo de sensualidad le
dio un beso en la boca inyectándole con una mano un tranquilizante en el
cuello, Amra quedo tendido en la cama que estaba en la habitación, los hombres
de antes entraron para llevar su cuerpo a la sala de operaciones, mientras
tanto, los hombres que había mandado el jefe habían salido en busca de la chica
que fue solicitada por aquel chico en busca de su venganza, las chicas vieron
salir rápidamente una camioneta del edifico frente a ellas, pensaban que ahí
llevaban a su amigo, pero no sucumbieron ante provocaciones, decidieron esperar
un poco más, pero sin duda eso había sido muy extraño, Paty tomaba fotos con su
celular para evidencias, sentía algo de pavor pero su orgullo por la noticia
perfecta iba más allá de sus miedos.
Aquellos hombres iban en busca de la chica en la dirección
otorgada por Amra, por su suerte la chica se encontraba regresando de una
fiesta que había ido con sus amigos, esta no estaba alcoholizada pero si estaba
ya agotada con mucho sueño, escucho un extraño ruido cerca de ella que hizo que
se espantara, con la vista borrosa noto a lo lejos una camioneta acercarse a
ella, Fany intento correr pero tropezó con una placa de cemento despegada en la
cera, los hombres salieron rápidamente de vehículo para tomarla le inyectaron
por igual un tranquilizante, le metieron a la parte trasera de la camioneta y
se fugaron del lugar sin dejar rastro alguno, poco rato después las chicas
vieron regresar a la camioneta, ya estaban muy cansadas pero Paty necesitaba
estar al tiro con su atención hasta el final.
-Paty mira, ya regreso.
-Si ya vi es verdad, no hay de otra tenemos que seguir adelante en
nuestro plan.
La camioneta entro al edificio, las chicas habían rodeado el mismo
para ver desde otro ángulo el lugar, logrando ver por dentro como era, notaban
algunas cuantas habitaciones en el encendidos, un enorme patio con unas cuantas
camillas, parecía un hospital abandonado, de repente Paty noto una sonrisa
dirigirse de lo lejos hacia ellas, aquella sonrisa pertenecía aun sin saberlo a
jefe de la Comunidad, estaba con los brazos detrás observando tranquilamente el
panorama, pues quería ver que su pedido fuera entregado con excito,
percatándose de que a lo lejos los observaban una chica y un chico, al que no tardó
mucho en reconocer como Erik, que había ido hace unos días pidiendo por un
cambio, mientras que a la chica no la reconocía pero sabía que algo tramaba,
este les mostro una sonrisa algo burlesca aunque no muy malévola a decir
verdad, el hombre midiendo un metro con 80 centímetros, de pelo rubio con gafas
y vestimenta negra, portando un estetoscopio así como una bata color blanca, el
hombre de test blanca ordeno cerrar el portón después de ver que la chica había
llegado, las chicas vieron que el cuerpo de una chica era sacada de aquella
camioneta, mientras que el hombre ordenaba cerrar la puerta, ambas chicas
quedaron atónitas, pues sabían que el hombre las había descubierto, intentaron
esperar un poco más, pero el miedo las inundó, ni siquiera Paty había logrado tomar la foto de
la evidencia máxima, que además sin saberlo había logrado ver frente a frente
el jefe de la Comunidad, las chicas dejaron todo su plan, regresando a casa,
sabían que habían dejado abandonado a su amigo pero era eso o sus vidas, sin
más intentaron dormir lo que restaba de la noche, implorándole a dios por la
vida de su amigo.
Continuala, está muy buena. Espero le agregues toques suculentos
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