Capítulo 6: a
solas con mi marido.
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Han pasado 2
días desde que llegue a un arreglo con Daniela y mi situación no ha mejorado
aun, aparentemente encontrar a la Sra. Reynolds en mi cuerpo es más difícil de
lo que anticipe, pero no puedo rendirme tengo que encontrarla y recuperar mi
antigua cuerpo antes de que mi marido quiera tener sexo con mi migo otra vez.
Hasta ahora
eh logrado engañarlo al decirle que no puedo concentrarme en nuestra relación
mientras que Jenny este alterada por nuestro rompimiento, pero esa escusa no me
servirá para siempre, y mi nuevo esposo se pone cada vez más y más insistente
conmigo.
Comencé mi
día como todos los anteriores desde que llegué a esta casa, teniendo que
arreglarme para desayunar con mi exnovia, ahora hija y mi ex suegro, ahora
esposo, lo cual me parece cada vez una situación más trillada.
Como hasta
ahora baje las escaleras para desayunar y cual sería mi sorpresa cuando
encontré a Bruce desayunando junto a Jenny la cual se veía alegre por primera
vez en días, parecía ser que por fin empezaba a recuperarse y al verme dijo.
“buenos días mama, ¿cómo has estado?”
Yole
respondí. “bien cielo, me alegra el verte más alegre hoy.”
A lo cual
Jenny dijo. “tengo razones para estarlo, después de lamentarme por días me di
cuenta de que, si Greg me dejo de una manera tan desconsiderada, obviamente él
no era el hombre de mi vida, así que decidí no preocuparme más por ese cretino
y disfrutar mi vida, así que anoche Salí cuando ustedes se durmieron y me
divertí con unos cuantos chicos y solo digamos que me siento mucho mejor.”
Esto era
otro problema, es decir me alegraba que Jenny finalmente se sintiera mejor,
pero no quería que ella renunciara a nuestra relación, después de todo yo la consideraba
la mujer de mi vida y tenía la esperanza de volver con ella al recuperar mi
cuerpo.
Entonces las
cosas empeoraron aún más cuando Jenny dijo. Por cierto, mama, ahora que me
siento mejor he decidido que hoy regresare a casa, así que pronto los dejare a
ti y papa solos para que puedan hacer todas esas cosas que no pueden cuando
estoy cerca, que estoy segura que deben estar extrañándose el uno al otro.
Me horrorice
ante la posibilidad de quedarme a solas con el sr. Reynolds otra vez, ser
cogida por él fue más que suficiente para toda una vida y no estoy dispuesto a
convertir eso en un hábito por lo cual dije. “cielo, estas seguras que ya
quieres irte, podrías quedarte unos cuantos días, semanas, meses o más tiempo
si quisieras.
Pero ella me
respondió. “no mama, no podría, estoy siendo una carga para ti y papa e imagino
que ya se extrañan.”
Tenía que
pensar en algo, lo que fuera para no quedarme sola con mi marido. Pensé rápido
y dije. “¿quieres ir a divertirte?”
Ella
pregunto. “¿de que estas hablando mama?”
A lo cual le
respondí. “dices que salir anoche te hiso sentir mejor, y como madre preocupada
creo que es importante que te vigile para que no te metas en problemas así que,
en vez de salir de la ciudad a buscar divertirte en tu casa, pues podrías
quedarte aquí y salir a divertirte conmigo para que ningún chico se pase de
listo, ya sabes conmigo como chaperona.”
Ella
respondió. “eso es ridículo mama, ¿por qué saldría a divertirme con mi madre?”
Jenny me
respondió. “pues… porque ya no pasamos tanto tiempo madre e hija y me siento
sola.”
Ella me
respondió con un. “¡ah….! Mama, no sabía que me extrañaras tanto.”
Yo le
conteste. “si… ya sabes soy tu madre y todo eso, así que supongo que lo que
dije tiene lógica.”
Jenny
respondió. “bueno es un poco incómodo salir a buscar chicos con mi mama, pero
supongo que sigues siendo atractiva para tu edad y no creo que alejes a los
chicos, pero ¿qué hay de papa?”
Respondí.
“él sabe que jamás lo engañaría, no creo que se oponga.”
En verdad
las cosas no habían resultado como yo quería, intente evitar tener intimidad
con mi marido y ahora me había ofrecido a salir con Jenny a verla divertirse
con otros hombres, pero era algo que estaba dispuesto a ignorar hasta cierto
punto con tal de no ser yo quien tuviera sexo esta noche.”
Jenny me
dijo. “Bueno mama en ese caso hay que arreglarse.”
Sin más me
llevo a m recamara, más bien la de mis suegros e insistió en ayudarme a
seleccionar un vestido y arreglarme para no arruinar su estilo, luego de lo
cual termine con una falda y una blusa demasiado reveladoras para mi gusto
sobre todo si es que yo iba a salir en público usándolas.
Al verme
Jenny dijo. “te ves muy bien mama, espero lucir así cuando tenga tu edad.”
Y nuevamente
Jenny mencionaba mi edad recordándome lo madura que ahora soy, como si no fuese
suficiente con tener todo un nuevo aparato reproductivo, uno del cual salió mi
novia, además tengo que lidiar con ser una Sra. De edad.
Ya íbamos de
salida cunado mi esposo dijo. “¿A dónde van mis damas vestidas así de elegantes?”
Jenny
respondió. “mama quiere ayudarme a recuperarme de lo del estúpido de Greg y si
ofreció a venir de chaperona a divertirse conmigo.”
Bruce
contesto. “cariño, ¿es en serio? Ya no eres tan joven como para salir a hacer
esa clase de locuras con nuestra hija.”
Le conteste.
“soy su madre y no puedo permitir que nuestra hija salga de esta casa, así como
así, tengo que cuidarla, incluso si eso significa que se quede unos cuantos
días o semanas más en esta casa.”
En ese
momento Bruce se me acerco me abraso y me susurro al oído. “estas segura linda,
después de tantos días pensé que estarías impaciente por que Jenny se fuera
para que tuviéramos algo de intimidad.”
Traté de
disimular y le dije en voz baja. “lo estoy cielo, nada me haría más feliz que
el que me cogieras por horas, pero estoy muy preocupada por nuestra pequeña.”
Finalmente,
una hora más tarde estábamos en la entrada de un bar en el cual había muchos
hombres y mujeres de diferentes edades, yo suponía que Jenny había elegido este
lugar por el rango de edad más variado respecto de otros lugares, yo no
repelería ninguna pareja potencial para el en un lugar como este, lo cual de
por si era malo pues no podría impedir que mi Jenny se buscase pareja como
pretendía hacerlo en el afán de recuperar mi cuerpo y reconquistarla, pero para
complicar más las cosas el bar estaba lleno de hombre de edad madura que no
dejaban de mirarme como si yo fuese un trozo de carne e incluso algunos de ellos se me acercaron y
ofrecieron cómprame tragos para lo cual agradecí el que traía un anillo de
compromiso con migo, de lo contrario habría tenido que encontrar un modo
diferente de librarme de esos tipos, muchos de los cuales me doblaban la edad,
o al menos mi edad original, pero hasta donde ellos veían yo era una Sra. que
podían coger y eso en definitiva no lo permitiría.
El problema
surgió cuando me di cuenta que al estar tan concentrado en repeler a los
hombres que venían tras de mi había perdido a Jenny de vista y aun peor me
había quedado solo en el bar para lidiar con los hombres.
Entonces
apareció, un hombre era más alto que el promedio, en buena forma para su edad y
con aspecto de estar cazando y con una mira de que me decía que en este preciso
momento yo era su presa.
El hombre se
me acerco y dijo. Hola preciosa, vi que tu hermana menor salió del bar hace un
rato si es que la estabas buscando, así que si te sientes sola puedo hacerte
compañía.
Esa era una
línea de conquista bastante cliché y ciertamente no iba a funcionar conmigo por
lo que conteste. “gracias, pero estoy bien sola”
Pero el don
juan no parecía dispuesto a rendirse tan fácilmente y respondió, vamos solo un
ratito y si no te gusta podemos quedarnos juntos otro ratito más.
Entonces
empecé a enfadarme y le respondí. “¡mira viejo, solo lárgate y déjame en paz no
estoy interesada y soy casada!”
A lo que el
hombre me contesto. “si estuvieras feliz con tu matrimonio no estarías aquí
linda.”
De la nada
el sujeto comenzó a abrasarme y sujetarme fuertemente contra su cuerpo, era un
hombre viejo, pero era más grande y fuerte que yo en este momento, aunque de
estar en mi cuerpo probablemente lo habría detenido con facilidad, ahora yo no
era rival para él.
Traté de
alejarme de él, pero el cretino seguía intentando besarme y me di cuenta, los hombres
pueden ser muy aterradores para las mujeres, y ahora yo era una mujer en
peligro directo, cuando alguien golpeo al mastodonte y lo noqueo.
Al ver al
sujeto en el suelo, mire atrás de él y vi que quien lo había noqueado era Bruce
mi… esposo diciendo. “estas bien linda, perdón por seguirlas, pero quería
asegurarme que mis damas estuvieran bien”
Al verlo
abrace a bruce de inmediato y comencé a llorar sintiéndome más seguro en sus
brazos, por muy humillante que esto fuese, yo estaba asustado y quería que
bruce me sacase de aquí cuanto antes.
Un rato más
tarde estábamos de regreso en casa y yo aún temblaba de miedo por lo que el
sujeto en el bar pudo llegar a hacerme.
Bruce dijo.
“cariño que paso en el bar, ese sujeto pudo lastimarte, donde estaba Jenny.”
Le respondí.
“la perdí de vista por u minuto y desapareció, no esperaba que ese sujeto se me
apareciese.”
Bruce estaba
molesto y no podía culparlo, después de todo yo casi había sido abusado por el
sujeto del bar y hasta donde Bruce sabía yo era su esposa, así que trate de
calmarlo, después de todo, esto era en gran parte mi culpa por no dejar que
Jenny regresara a casa, así que le dije. “cielo, lamento mucho todo esto, pero
por favor tranquilízate.”
Bruce
respondió. Está bien supongo que no hay razón para alterarme ya que te
encuentras bien y… pues estamos solos los 2 justo ahora.”
Cuando me
dijo esas palabras Bruce comenzó a mirarme con ojos de lujuria y yo sabía muy
bien lo que eso significaba y siendo que acababa de salvarme y de momento no me
convenía hacer enfadar a Bruce tendría que seguirle el juego.
De la nada
Bruce me beso y nuevamente tuve que experimentar los labios de mi suegro contra
los míos, como esperaba no tener que repetir mucho más de esto para entretener
a Bruce, pues la experiencia era muy diferente de besar a una mujer, por un lado,
los labios de Bruce eran grueso y sentía su barba rasposa contra mi boca además
de que siendo un hombre heterosexual no me agradaba la historia de besar o ser
besado por un hombre maduro.
Ya encarrilado
Bruce me quito el vestido y me apoyo sobre la cama siendo esto algo que en
realidad yo no quería revivir, ¿porque era que entre todos cuerpos con lo que
pude haber terminado tenía que terminar con el de mi suegra y viéndome obligado
a cumplirle a mi esposo en la cama?
Pero por
mucho que esto me desagradase, hasta recuperar mi cuerpo esta era mi realidad, y
al menos de momento no había que hacer al respecto.
En ese instante
conmigo en la cama el comenzó a desvestirse preparándose para cogerme.
Intente alejarme
arrastrándome por la cama, esperando poder inventarle una excusa a Bruce y tal vez
evitar que me cogiera de nuevo, pero por los días que habían pasado desde la última
vez que tuvimos sexo el no parecía querer escuchar y me sujeto y coloco en posición.
Le dije, “amor,
no me siento muy bien podemos dejarlo para otra noche.”
El respondió.
“cariño tuve una pelea en un bar por ti y de verdad no planeo dejar esto a
medias.”
Bruce estaba
determinado y sin que me hubiese mojado todavía comenzó a introducirme su pene
en mi vagina, lo cual sin estar preparado me causo algo de dolor, pero hasta
cierto punto de buen modo y sin darme cuenta de cuando ni por que yo me estaba empezando
a exitar con su miembro.
Puede que
fuera por la forma en que el me había protegido en el bar o la forma que de algún
modo él me estaba dominando, pero sentía a mi suegro más varonil, más masculino
y de algún modo atractivo.
No sé en qué
momento empecé, pero me di cuenta de que sin querer ahora estaba jugando con
mis propios senos y me sentía increíblemente excitado y hasta cierto punto
poderosa, tenía a un hombre protegiéndome, lo cual de algún modo hiso que por
primera vez desde que estoy en este cuerpo me sintiera como su mujer y no solo
un hombre atrapado en el cuerpo de su esposa.
Sentía su
fuerte cuerpo el cual ahora me percataba era mucho más fuerte que el mío y poco
a poco me excitaba más por el hecho de saber que este fuerte y poderoso…. ¡No…
maldita sea tengo que recordarlo soy un hombre no una esposita para que me
cojan!
Pero ya era demasiado
tarde pues justo cuando decidí alejarme de Bruce este se corrió dentro de mi permitiéndome
sentir el viscoso liquido dentro mío.
Al terminar todavía
sintiendo su esperma en mi interior, Bruce me abraso y se durmió a mi lado mientras
que yo pase el resto de la noche llorando en la cama, pensando, que ocurrirá si
esto llega a gustarme, yo no quiero pasar el resto de mi vida siendo mi suegra
y mucho menos dejando que mi suegro me coja.
Estaba echo
trisas ante la posibilidad de que esto durase para siempre, cuando recibí un mensaje
por mi celular el cual decía.
Greg. Es Daniela,
ya tengo el otro aparato y creo haber encontrado el paradero de nuestra amiga
en común, así que prepárate, porque volverás a ser el de antes.
Por fin una
buena noticia, Daniela había localizado a mi suegra en mi viejo cuerpo.
En ese
momento recibí un segundo mensaje, el cual era de Jenny que decía, no me
esperes, estoy con un chico, una vez que termine con el regresare a mi casa, tu
diviértete con papa.
Al parecer Jenny
había encontrado compañía, pero de momento so no me preocupaba pues si recuperaba
pronto mi cuerpo tal vez aun tendría oportunidad de recuperarla, pero eso tendría
que esperar hasta mañana cuando por fin pudiera ver a Daniela.
Fin del capítulo
6
Ricardo: asi es - no recordaba nada de esa fiesta pero al ver el cuerpo de Ingrid quiso seguir la corriente para ver hasta que punto llegaba con ella
Sin más me
llevo a m recamara, más bien la de mis suegros e insistió en ayudarme a
seleccionar un vestido y arreglarme para no arruinar su estilo, luego de lo
cual termine con una falda y una blusa demasiado reveladoras para mi gusto
sobre todo si es que yo iba a salir en público usándolas.
De la nada
Bruce me beso y nuevamente tuve que experimentar los labios de mi suegro contra
los míos, como esperaba no tener que repetir mucho más de esto para entretener
a Bruce, pues la experiencia era muy diferente de besar a una mujer, por un lado,
los labios de Bruce eran grueso y sentía su barba rasposa contra mi boca además
de que siendo un hombre heterosexual no me agradaba la historia de besar o ser
besado por un hombre maduro.
Bruce estaba
determinado y sin que me hubiese mojado todavía comenzó a introducirme su pene
en mi vagina, lo cual sin estar preparado me causo algo de dolor, pero hasta
cierto punto de buen modo y sin darme cuenta de cuando ni por que yo me estaba empezando
a exitar con su miembro.
No sé en qué
momento empecé, pero me di cuenta de que sin querer ahora estaba jugando con
mis propios senos y me sentía increíblemente excitado y hasta cierto punto
poderosa, tenía a un hombre protegiéndome, lo cual de algún modo hiso que por
primera vez desde que estoy en este cuerpo me sintiera como su mujer y no solo
un hombre atrapado en el cuerpo de su esposa.
Pero ya era demasiado
tarde pues justo cuando decidí alejarme de Bruce este se corrió dentro de mi permitiéndome
sentir el viscoso liquido dentro mío.
