Capítulo 5: un
paso adelante y dos atrás
Aquí les dejo
el capítulo 5 de otra perspectiva, debo decir que hasta ahora en esta historia,
este ha sido mi capitulo favorito, por lo que espero sea de su agrado, también comento
que dentro de 1 semana las cosas parecen ser que se alinearan de tal manera en
que yo tenga más tiempo para escribir por precisamente 2 semanas, por lo que
planeo usar ese tiempo para adelantar mis historias.
Por ultimo les
pido que si disfrutan de esta capitulo por favor lo comente pues esa es mi motivación
para seguir escribiendo.
Te invito a dejarme tu like cuando menos en los comentarios para que no tengas pena de comentar tan solo un bonito like espero muchas gracias.
Han pasado
unos cuantos días desde mi… incidente con el jardinero, luego de lo cual él no
ha dejado de perseguirme insistiendo en otra cita u otra… noche de intimidad,
pero he decidido evitarlo en la medida de lo posible tanto al el como a
cualquier otro hombre ya que parece ser que mi propio cuerpo no es confiable al
estar cerca de los hombres, como si su proximidad me volviera increíblemente
sumisa y complaciente, al grado de que casi podría tener sexo con cualquier
hombre que me lo pidiera y se vuelve cada vez más difícil suprimir esta
necesidad de mi propio cuerpo.
Debo decir
que mantenerme en este cuerpo no ha sido fácil, mi esposa Carol es
particularmente exigente con las labores del hogar especialmente desde que no
he regresado a casa y ella sospecha que muy probablemente escape con una
amante, lo cual de no ser por mis circunstancias actuales tal vez sería verdad,
afortunadamente he contado con la ayuda de Sofía y Carmen las otras 2 criadas
de la casa, para ayudarme a sobrellevar mi situación, además de mi hija Anna
quien se ha mostrado amable con migo al ayudarme sin saber nada sobre mi o mi
verdadera identidad, de no ser por eso quien sabe dónde habría terminado,
probablemente en alguna esquina chupando pitos por dinero, pero esperemos que
pueda regresar a la normalidad antes de caer tan bajo.
finalmente,
hoy es mi día libre y planeo ir a donde el chofer para recuperar la estatuilla
y con ella mi cuerpo, para lo cual he decidido pedirle a Anna nuevamente un
poco de ropa para salir de casa, así que esa mañana desperté y me dirigí a a la
habitación de Anna para solicitarle la ropa, pero cuando iba a entrar escuché a
Anna y a Carol discutiendo, nuevamente en inglés para lo cual no me era posible
entenderlas, no desde que esta maldición se manifestó en mi cuerpo dejándome
completamente incapaz de hablar otro idioma más que el español, pero por el
tono de sus voces parecía ser una discusión seria.
En ese
momento mi esposa Carol salió de la habitación y me miro con furia en sus ojos
y dijo algo, que nuevamente no pude entender, pero por su tono asumí no era
nada bueno, me cuesta creer que ella es la mujer con la que me case, aunque
reconozco que yo no era mucho mejor como jefe de lo que es Carol.
Entre a la habitación
donde Anna me recibió diciendo. “hola maría, buenos días, ¿necesitas algo?”
Yo
tímidamente le respondí. “sé que ya te lo he pedido antes, pero, ¿podrías
prestarme algo de ropa?”
Anna dijo.
“seguro, cuando quieras linda, supongo que tienes otra cita con el chico Luis,
me entere que te fue bastante bien en la última.”
Yo la verdad
no llamaría a tener sexo con el como algo bueno, considerando que lo hice solo
por el efecto de la misma maldición que me dejo en este cuerpo y respondí. “no
en realidad, la verdad prefiero olvidarme de Luis por completo si no te
molesta.”
Anna me miro
y dijo. “no me dirás que te trato mal en su cita.”
Yo no quería
contestar, pero Anna parecía tener mucha curiosidad, y siendo ella una de mis
más grandes aliadas en este momento le conteste. “la verdad solo Salí con él
porque necesitaba que me hiciera un pequeño favor y una cita fue la condición
que me impuso para hacerlo, pero solo digamos que Luis no es exactamente mi
tipo.”
Anna
respondió. “lo lamento amiga, pero entonces ¿a dónde vas a ir?”
Yo le
respondí. “tengo que visitar a un conocido que tiene algo que me pertenece y lo
necesito de vuelta.”
Anna me miro
y dijo. “bueno, pues ojalá y te lo devuelva.”
Yo respondí.
“eso espero, por cierto, ¿de que discutían tú y tu madre hace un momento.”
A lo cual
Anna me dijo. “nada importante, solo problemas por los que está pasando mi
familia, es mejor que no te enteres, por cierto ¿qué opinas de este conjunto?”
Vi la ropa y
se trataba de una falda y una blusa blanca, la verdad hubiera preferido vestir
cualquier otra cosa, pero con mi cuerpo como esta y sin tener ropa propia, no
podía darme el gusto de elegir y ponerme lo que me prestaba mi hija.
Además de la
ropa Anna insistió en peinarme y nuevamente maquillarme y para cuando termino
me miro y dijo. “te ves fantástica linda, como desearía lucir tan bien como tú,
mis vestidos siempre se ven mejor en ti de lo que se ven en mí.”
Finalmente,
ya con la ropa Salí nuevamente a la calle algo a lo que aún no me asombraba
después de todo había pasado la mayor parte de mi tiempo en la mansión y no
estaba habituado a usar esta clase de ropa y mucho menos en público, pero tenía
que hacerlo para encontrar la estatuilla y con ella volver a la normalidad.
Entonces
caminé hacia la calle y me dirigí a la avenida más cercana para tomar un taxi a
la dirección que Luis me había entregado.
La verdad no
paso mucho tiempo antes de que un conductor me viera y se detuviera a decirme.
“te llevo preciosa.”
Anqué
ciertamente este no era un taxista por o que decidí negarme a acompañar a este
sujeto a ningún lado, así que le respondí. “¡seguro guapo!”
Entonces me
subí al auto sin siquiera pensarlo, yo no entendía que había sucedido, yo
quería negarme a la invitación, pero esas no eran las palabras que habían
salido de mi boca y ahora estaba sentado en el auto de un extraño del que no
sabía absolutamente nada.
El conductor
pregunto. “¿a dónde te llevo preciosa?”
Le di la
dirección a la que me dirigía notando como el conductor miraba claramente mi
escote, yo quería gritar por lo que pasaba pero no dejaba de sonreír, como si
de algún modo me complaciera que este sujeto me mirase.
Entones el
auto comenzó a avanzar y yo me coloque el cinturón de seguridad esperando que
este cuerpo no me jugara otra mala pasada, o peor aún que este tipo no fuera
alguna clase de loco.
Continuamos
avanzando cuando de repente llegamos a un semáforo y el auto se detuvo
bruscamente pues el conductor estaba demasiado distraído mirándome como para
ver el camino al frente.
Para mi mala
suerte el movimiento del auto hiso que me fuera hacia el frente por lo que tuve
que sujetarme de algo, pero nuevamente mi cuerpo reacciono en contra de mi
voluntad y en lugar de sostenerme de la puerta o alguna otra superficie, me
sujete fuertemente del muslo de este sujeto, casi dándole una invitación, para
hacer algo más conmigo, así que me disculpe diciendo. “lo ciento guapo, pero me
asuste un poco.”
Esto era
terrible, ahora veía que yo no dejaba de coquetear con este hombre, no entendía
como mi cuerpo podía actuar de este modo, pero lo peor de todo era que cada vez
que lo hacía me sentía más y más excitado.
Finalmente
llegamos a nuestro destino y baje del auto alegrándome de no haber sido violado
o peor, pero en ese momento el conductor me dijo. “oye preciosa me das tu
número.”
Me entrego
un bolígrafo y yo respondió. “seguro guapo.”
Escribí el
número de la mansión en su mano y le dije. “¡llámame pronto, que estoy
impaciente de volver a verte!
Una vez el
sujeto se fue, mi cuerpo nuevamente estivo bajo mi control, pero en este punto
era tarde pues le había dado mi número telefónico a un extraño.
Decidí no
darle tanta importancia pues estaba justo en donde debía estar en la casa del
chofer que se llevó la estatuilla y parecía estar de suerte pues justo en
frente estaba el auto el cual el chofer se había llevado.
Observe por
la ventanilla del auto, pero desafortunadamente no había nada adentro, o por lo
menos no estaba la estatuilla.
Al darme
cuenta de esto no me quedaba de otra más que subir al apartamento del chofer y
obligarlo a darme lo que quería así tuviera que lastimarlo un poco.
Me dirigí a
la puerta con toda mi determinación preparado para tomar cualquier acción que
se necesitara para recuperar mi cuerpo.
Y una vez
frente a la puerta comencé a golpearla para que el chofer me abriera.
Segundos
después el finalmente abrió la puerta y al verme dijo. “hola preciosa que puedo
hacer por ti.”
Yo le
respondí. “devuélveme mi estatuilla maldita ladrón.”
El pregunto.
“quien es usted, yo no soy ningún ladrón.”
El parecía
no comprender, lo que era comprensible pues él se había ido antes de que mi
transformación se completara y no me había visto con este aspecto, así le dije.
“eres un ladrón, o no es mi auto el que está frente al edifico, el mismo que te
llevaste cuando me dejaste abandonada al lado del camino.”
El contesto.
“como sabe eso el único que estaba allí era ese viejo gringo al cual estaba
cubriendo esa…. ¿¡Es usted!?”
Respondí. “¡pues
claro que soy yo, maldito ladrón!”
El cerro la
puesta aterrorizado al darse cuenta de lo que pasaba.
Yo le
gritaba tras la puerta. “¡déjame entrar maldito, tienes que darme mi
estatuilla!”
Él dijo. “me
deshice de esa cosa hace días, obviamente estaba maldita.”
Esto era terrible,
se había deshecho de mi única esperanza de recuperar mi cuerpo, pero no me iba
a rendir por eso, lo obligaría a decirme que había hecho con ella.
Así que seguí
tocando y gritando tras la puerta cuando el chofer grito. “¡solo cállate maldita
bruja y déjame pensar!”
Al instante cerré
la boca y por más que quería no podía abrirla, lo que es mas no podía hace
sonido alguno, ni siquiera caminar pues eso habría echo ruido con mis tacones.
Segundos más
tarde el chofer abrío la puerta y al ver que todavía estaba allí cerro de
inmediato, entonces abrió nuevamente y dijo. “ya no estas gritando, ¿Por qué?”
Yo no sabía
la razón, pero en efecto yo no podía gritar o hacer ningún sonido.
Al ver que
yo no respondía el chofer dijo. “y bien… contéstame, ¿porque no hablas?”
Yo no sabía
la razón, pero entonces sin control de mi propia boca dije. “por qué me ordeno
estar callada.”
Entonces me volví
a callar y él dijo. “y ¿por qué haces lo que te ordeno?”
Yo conteste.
“porque eres un hombre y hare cualquier cosa que me ordene un hombre.”
Nuevamente yo
había respondido, pero las palabras que salían de mi boca no eran lo que yo quería
decir.
El pregunto.
“¿Por qué?”
Yo nuevamente
escuche como de mis labios salía una respuesta. “por qué así funciona la maldición
de los guerreros vencidos, convertidos en compañeras de los hombres de la cultura
la cual los ha conquistado.”
El pregunto.
“¿esto tiene que ver con esa estatuilla que buscabas?”
Nuevamente mi
boca contesto. “así es señor, esa estatuilla lleva la maldición y convierte a
quien la activa en una mujer de la cultura de cualquier país en que se
encuentre, completamente sumisa y obediente ante cualquier hombre.”
No tenía
idea de donde estaba saliendo toda esta información, era como si algo se
hubiera apoderado de mi cuerpo, y ese algo quería que yo obedeciera cualquier
orden que me diera un hombre.”
Entonces el
chofer puso una mirada un tanto siniestra y dijo. “interesante, entra linda,
quiero hablar con Tigo.”
Yo de
inmediato entre y me quede parado en silencio.
Él dijo. “maldición,
si esa estatuilla era capaz de hacer esto, debí haberla conservado en vez de
mandarla lo más lejos posible, en fin, supongo que tu serás mi premio de consolación.”
Él dijo quítate
la ropa.
Yo de
inmediato obedecí, pero cuando iba por mi ropa interior él dijo. “alto allí quiero
hacer esto bien.”
Yo estaba
completamente en estado de pánico, quería gritar, pero no podía moverme o
emitir sonido alguno hasta que este sujeto me lo ordenara.
El chofer
dijo. “dime aún queda algo de tu viejo tu dentro de ti, y si es así porque
viniste aquí sabiendo que esto podía pasarte”
Yo respondí.
“por qué no lo sabía, hasta ahora ningún hombre me había dado una orden como
tal, o por lo menos ninguna que no tuviera que cumplir trabajando como
sirvienta, así que jamás me di cuenta de esto.”
El chofer
dijo. “entonces habla con libertad, dime cómo te sientes sobre esto.”
Yo estaba
asustado, pero finalmente podría volver a hablar y le dije. “por favor, solo déjame
ir y no volverás a escuchar de mí, solo quiero recuperar mi vieja vida.”
El chofer lo
pensó unos segundos y me contesto. “mira amiga, lo lamento mucho, pero estas
oportunidades no se presentan todos los días así que a partir de ahora eres mía
y voy a sacar el máximo provecho de esto, así que tienes 2 opciones, tratar de
disfrutarlo o servirme obediente y calladamente.”
me quede
callado, nuevamente sin poder hablar o expresarme, mientras pensaba, alguien
tiene que venir a rescatarme, mi esposa, mis hijos, Sofía y Carmen, oh por dios
incluso aceptaría a Luis, alguien tiene que preguntarse dónde estoy y venir.
Al instante
el chofer dijo. “muy bien ponte de rodillas y hazme una mamada.”
Yo obedecí
de inmediato, tratando de resistirme a la maldición lo más posible, pero mi
cuerpo actuaba ahora por cuenta propia y mi resistencia solo lograba detenerme
en la punta de su pene mientras yo intentaba no tocar nada demasiado.
Pero al ver
que me resistía el chofer me dijo. “¿Por qué tan tímida linda?
En ese
momento con sus manos empujo mi cabeza hacia el frente y me ordeno. Hazlo como
se debe.”
Y así me encontré
con su pene completamente dentro de mi boca y hasta mi garganta, haciendo todo
lo posible para satisfacerlo y lo peor de todo era que una parte de mi de echo
lo disfrutaba y yo asumía era también por la maldición.
Luego de
unos minutos el chofer eyaculo en mi boca y dijo. “trágalo linda y disfrútalo.”
Al instante
el desagradable sabor del esperma se transformó y ahora su fragancia y aroma me
eran irresistibles, y me lo trague casi de inmediato y aun peor yo quería mas,
desesperadamente necesitaba sentir ese sabor nuevamente en mi boca, y era lógico
pues el chofer me había ordenado que lo disfrutara.
En ese momento
el chofer me ordeno. “ahora termina de desvestirte y recuéstate y yo de
inmediato cumplí la orden y así sin más el chofer se me acerco y con su pene
vien erecto me dijo. “abre bien las piernas preciosas, porque te voy a convertir
en mi mujer.
Yo de
inmediato abrí las piernas y me preparé para que este sujeto introdujera su
pene dentro mío, acto que el cumplió de inmediato y luego dijo. “disfruta de
esto preciosa, por que haremos esto con mucha regularidad.”
Y así de
inmediato yo comencé a disfrutar de esto como nunca había disfrutado del sexo
en mi vida y al instante de mi nueva vagina una neblina casi transparente
parecida a la que ya antes había brotado de mi, cuando tuve sexo con mi hijo y pareció
al igual que en el caso de mi hijo aumentar el tamaño del miembro del chofer, asiéndome
disfrutar aún más de esto.
Seguimos así
durante horas y horas, hasta que quede completamente incapaz de levantarme.
Cuando el
chofer dijo. “estoy agotado, creo que merezco una recompensa por todo este
trabajo, oye vieja, párate y ve a la cocina a prepararme algo delicioso de
comer.”
De algún modo
mis piernas se movieron solas incluso con lo exhausto que yo estaba y camine a
la cocina a preparar algo mientras en mi mente solo pensaba, ¡por favor que alguien,
quien sea venga a salvarme!
Fin del
capitulo 5
Tardo el cap. Pero valio la espera. Muy bueno
ResponderBorrarMuchas gracias por escuchar mi comentario!!
ResponderBorrarBuenísimo capitulo ;3.
ResponderBorrarSigue por favor!!!
ResponderBorrarMuy bueno sigue por favor!!!!!!!
ResponderBorrarDe lo mejor que he leído en esta materia. Genial!
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