"El destino de una Panti"

Por fin me encontraba en el cuarto de Eiza, la había perseguido como un acosador despiadado todos estos días luego de que supe que estaría en mi ciudad por una producción de películas, no se como pero un hechizo lunático de esos que se encontraban por los blogs extraños de transformaciones y cambios de cuerpo decía que podría transformarme en una panti, yo pensaba en cómo sería posible algo así, si somos perdonas, humanos, seres vivos compuestos de carne y hueso, pero bueno, no quería hacer especulaciones tontas, aun así terminaría en la cárcel si esto no funcionaba, por suerte también descargue el hechizo de cambio de cuerpo por si funcionaba en vez del otro y así lograr quedarme con el cuerpo de Eiza, aun así, estaba dentro de su cuarto de hotel, escuche pasos provenientes del pasillo y posteriormente que abrían la puerta, rápido me apresure a conjurar el hechizo, pasaron 5 minutos en los que tuve que esconderme en el armario de la lujosa habitación pues en efecto el hechizo no había funcionado, dentro del armario, comencé a sentir calor, luego comencé a sudar experimentando una presión muy estremecedora en el cuerpo, poco a poco parecía que el humo salía de mi como sangre entre otras partes de mi cuerpo como órganos etc., muy como si estas se estuvieran quemando y saliendo para dejar todo hueco, eso me ardía demasiado, pensaba que el hechizo función finalmente pero de una manera terrorífica y dolorosa, convencido de que moriría al hacerlo, finalmente mis huesos los últimos en permanecer aun dentro de mi cuerpo se estaban pudriendo, parecía como si mi cuerpo estuviera en descomposición, mis huesos se desquebrajaban ocasionándome fuertes lesiones, en estos momentos mi cuerpo esa una gelatina de piel humana que no podía mover, por si fuera poco mi cerebro también se desintegro saliendo como humo, para entonces yo ya no tenía más que la conciencia de mi alma sufriendo por el dolor de mi cuerpo hecho mierda, mi piel siendo lo último que quedaba como un saco sin vida comenzó a reducirse de forma elástica, hasta convertirme en una tela de piel humana que se formaba poco a poco como una panti color blanca, al parecer Eiza estaba borracha y no se enteró nunca del tipo escondido en su armario sufriendo una tortura interminable, paso un poco de tiempo para que Eiza tomara sus cosas, estaba apurada escogiendo que ponerse pues tenía que vestirse bonita para una sesión fotográfica, abrió el armario donde afortunadamente fui lo primero que vio, necesitaba una panti que combinará con su bra, ella no imaginaba que en realidad ese objeto tan personal fuese en realidad un hombre antes de transformarse en un trozo de tela, yo sin en cambio parecía no tener emociones, no podía pensar ni razonar, era una panti, como se supone que podría hacer algo, simplemente observaba desde las entrañas espirituales que aún me quedaban como era utilizado para ser puesto sobre lo que más deseaba que era su vagina, intente mover mis delgados pelos de tela que serían como la pelusa, parecía que si lograba realizar ese movimiento estático pues apenas moví mis pelusas para rosar con la piel de ella exclamo un leve orgasmo como si alguien le hubiera acariciado, no me emocione pues no tenía emociones pero si sentía el placer que ella emergía de su cuerpo pues su aroma corporal entre otras cosas que desprendía su cuerpo se impregnaban en mi tela y parecía ser hermoso aunque no tanto como realmente lo era, pronto ella terminó de vestirse, parecía tan hermosa con el look que se había puesto con todos nosotros (la ropa), intente conectar de nuevo la estática de la tela con su piel pues esta rozaba en cada instante con sus partes ya que era su vagina, cuando caminaba yo le provocaba molestia pues con mis pocos movimientos le producía micro orgasmos los cuales le dejaban en vergüenza, pensaba aun en que grandioso era humillarla de esa manera, poco a poco lograba manipular aún más mi poder, hasta que la sesión de fotos fue todo un caos por mi culpa, gracias a mi los fotógrafos entre otros hombres del lugar se dieron un festín con  los orgasmos que Eiza gritaba, no podía realizar de buena manera las poses para ser fotografiada pero a cambio parecía que los productores estaba obteniendo un calendario pornográfico, grabaron a la chica y aprovecharon eso para otra cinta a la que agregaron los orgasmos naturales de la chica, ella intento quitarme pues entendió que yo le producía esos choques vaginales en su cuerpo, pero de alguna manera me aferre a su cuerpo y no pudo quitarme, entre más lograba moverme como una tela estática entre su cuerpo más ella jadeaba de placer, hasta que su vagina expulsó unos chorros que significaban que por fin le había hecho venirse, ella se sintió avergonzada con todos en la producción, se vistió de nuevo aun sin poder quitarme de su cuerpo, entonces me puse como en una especie de  vibrador tambaleando todo su cuerpo, casi se cae de solo provocarle esos ademanes tan excitantes para los que la veían jadear, su vagina escurría y eso le avergonzaba aún más, por fin llego a su hotel donde con todas sus fuerzas logro estirarme para sacarme de su vagina, estaba todo mojado, pero la experiencia fue de lo mejor incluso más de lo que hubiese imaginado, sin embargo ella tomo mi anatomía y la arrojo como en bola al cesto de basura, ahí permanecí, sucio, oliendo a fluidos vaginales, mojado y sin que nadie supiera de que mi existencia se encontraba en ese lugar, horas después el chico de la limpieza entro para sacar la basura, era de esos que intentaba quedarse con algo de un artista por mera excitación y perversión, para colmo era de esos que le gustaban pegarse las cosas intimas de las mujeres en las suyas como si eso no le fuese a traer consecuencias venéreas, me tomó estirándome, tan solo podía notar su cara de asombro cuando me tomo estirándome con sus dos manos frente a él, sus ojos mostraban impacto, su rostro lujuriedad y su boca un tremendo asco, sabía lo que venía, el tipo me olio y luego me lamio como si mis fluidos fueran de sabor de chocolate, pensé que tipo más asqueroso, me enrollo para esconderme y luego me guardo en su bolsillo, ahí estuve hasta que el tipo me llevó consigo a su casa, era de esos hombres que vivían solos acosta de su soledad y  perversión, el lugar estaba sucio, me sacó del bolsillo poniéndome en una mesa donde había más cosas que parecían ser basura, poco rato después este llego desnudo con una bolsa de papas y un par de cervezas, puso la tele conectado con el celular mientras ponía videos de Eiza, me tomo justo cuando me di cuenta de que su miembro ya estaba erecto, manipulaba de este con una mano y con la otra me sostenía mientras jadeaba por lo que estaba viendo en  la pantalla, suponiendo empezó a imaginarse placeres sexuales con la chica mientas usaba el tesoro que encontró de ella en su canasto de basura, pronto me comenzó a frotar con su miembro, eso fue lo más repugnante que pude haber pasado, no me imaginaba algo como eso, pronto su  miembro expulso el semen después de terminar de excitarse por su masturbada, ahora estaba manchado de sus fluidos mezclados con los fluidos ya viejos y quizás evaporados de Eiza, me tomo oliéndome una vez más para limpiarse lo que aún quedaba de semen en su cuerpo y me arrojo al piso como un trapo sucio, así pasare el resto de mi vida sin poder comunicarme con nadie, si tan solo tuviera  mi cerebro para lograr hablar, si tan solo hubiera hecho el conjuro de cambio de cuerpos en lugar de convertirme en un estúpido calzón.