𝑬𝒏𝒄𝒖𝒆𝒏𝒕𝒓𝒐 𝒆𝒙𝒕𝒓𝒂ñ𝒐 𝒄𝒐𝒏 𝒔𝒖 𝒎𝒂𝒅𝒓𝒆

 

Fernando había regresado a su casa hasta muy tarde, paso por el cuarto oficina de su madre sin importarle mucho lo que hacía, pero esta vez, el sonido desde dentro había sido diferente, escuchando un par de gemidos y jadeos, Fernando se había preocupado un poco, pero aun a pesar del tipo de ruidos que escuchaba, ni siquiera le importo lo que su madre estuviera haciendo dentro.

Luego de unas horas, Fernando estaba realmente fastidiado de escuchar gemir y gemir a su madre si control, bajo rápidamente y toco varias veces la puerta de su madre antes de entrar, notando aún más extraño el hecho de que ni siquiera esta tuviera seguro.

- ¿Qué…?, ¡Pasa! -su madre le decía, pero con un tono extraño –

- ¡Mama, estas desnuda Ahhh!, ¿Qué te sucede?, no has dejado de masturbarte demasiado fuerte desde que llegue –

- ¿Madre, cuando llegaste?, ¡Oh!, ¿Así que eres el hijo de esta linda putita eh? –

- ¿Cómo que linda putita?, ¿Qué te sucede mama? –

- ¡Oh, no nada, nada hijo, ve a tu cuarto y deja a tu mama hacer sus cosas de adultos, ¡Jejeje! –

- ¡Pero mama, mírate, te conozco, tu no haces estas cosas! –

- ¡Mira niño!, deja que tu madre se divierta un poco, bastante tiene con tener que cuidar a un niño grosero como tú, tu mami necesita relajarse un poco y jugar con su lindo cuerpecito un rato –

Fernando no entendía el extraño comportamiento de su madre, cerro inmediatamente la puerta y se regresó llorando a su cuarto luego de lo que le había dicho, pero Fernando no sabía que su madre había sido poseída por un Body Hopper que había saltado a su cuerpo esta mañana, notando lo cansada y frustrada que estaba de su vida, entonces, el Hopper decidió ayudarla un poco y saciar unas inmensas ganas reprimidas de ese cuerpo, luego de un largo tiempo de estrés acumulado.