Teiboleras

-¡Venga mamacita, muevete más rico, venga, que buenota estás mamacita! -la gente o más bien los hombres hambreados de lujuria le gritaban a las sexys señoritas que hacían su mejor esfuerzo por bailar -

-¡No mames Paco, eres un imbécil! -

-¡Cállate y muevete más rico!, no ves que tenemos que hacer que estos hombres nos den dinero para pagar todo lo que debemos, además, el único culpable aquí eres tú -

-¡Y yo porque verga tengo la culpa!, si tú eras el que decía que habías falsificado bien las identificaciones para que no sospecharán que éramos menores de edad y todavía así no traes dinero -

-¡Pues tu eras el que quería venir en su cumpleaños, mínimo hubieras traído dinero! -

-¡Pinches viejas ni se mueven rico, vámonos de aquí! -

-¡No, esperen, denos su dinero, por favor, ahorita les hacemos algo rico! -

-¡Cállate y muevete más, habrá que quitarnos la ropa para convencerlos -

-¡Estás imbécil!, Que vergüenza, espero que de verdad ese tipo nos devuelva nuestros cuerpos, esas tipas parecian bastante sospechosas cuando obtuvieron nuestros cuerpos -

-¡Es verdad!, por cierto, no las eh visto ya por aquí con nuestros cuerpos, seguramente se escaparon, qué vamos a hacer ya no aguanto más estar así -

Paco y Tomás eran dos chicos de 16 años que ya estaban desesperados por ser grandes y poder visitar un Taibol, así que Paco logró falsificar unas identificaciones para llevar a Tomás en su cumpleaños , pero cuando estos consumieron un privado cada uno no se imaginaron que costaría tanto y ninguno llevaba el dinero suficiente para pagarle a las sexys chicas que les habían ofrecido sus servicios.

Cuando estás le reclamaron a su jefe por lo sucedido, los chicos intentaban escapar, pero entonces, fueron detenidos por unos grandes gorilas de guardias y tuvieron que obedecer con mucho miedo.

-¿Así que no tiene dinero para pagarle a mis chicas eh?, Bueno, pues entonces tendrán que trabajar como ellas por el resto de la noche para pagarme la cuota -

Luego de decirles eso, ninguno de los chicos entendía de que manera le pagarían a aquel hombre con imagen de la mafia, estaban muy nerviosos y entonces, el hombre saco un par de medallones colocándoselo a cada uno, de repente, Paco y Tomás sintieron como sus cabeza giraba como una especie de remolino hasta que por fin se detuvieron y se encontraban mirando impactados sus propios cuerpos frente a ellos.

Paco y Tomás comenzaron a sentirse extraños, pero entonces, miraron sus nuevos cuerpos extrañados y con mucho miedo.

-¡Paco!, ¿Eres tú? -una chica le decía a la otra -

-¡Si!, ¿Tomás? -

Ambos chicos jadearon la mirar sus nuevos cuerpos asustados, comenzaron a acariciar sus cuerpos y entonces el hombre los interrumpió.

-¡Que bien señoritas!, espero así de afanadas estén para mis clientes y paguen la cuota que me deben, ahora a trabajar -

Dicho esto, Paco y Tomás se apresuraron a salir al bar a convencer con mucha vergüenza a hombres para hacerles un privado, se sentían muy humillados y tenían miedo de no recuperar sus cuerpos, la noche ya se están haciendo larga y nomás no juntaban el dinero ni podían convencer a ningún hombre de que eran unas viejas bien buenas para el Taibol, no tenían práctica y tampoco sabían ser mujeres, lo peor, es que las chicas ya se sentían tan oprimidas por sus mediocres y humillantes trabajos de Taiboleras que aprovecharon esta oportunidad para escaparse con los cuerpos de los chicos, ahora Paco y Tomás pagarán muy caro el haber engañado la legalidad tan solo por un deseo adolescente.

-Kary-