“Posesión”
Entraba
una vez más a la oficina de mi supervisora, todo parecía tener el calor
necesario para percibir que la mujer estallara una vez más, la tipa se había
colado entre todos los buenos empleados aprovechándose de su buen cuerpo, ni
siquiera esa puta tenia los suficientes estudios, solo porque venía de Europa
al parecer de Ucrania o de Croacia, con
sus bellos rasgos finos y si perfecto acento inglés para los trabajos
internacionales, aun así era inteligente porque sabía hablar varios idiomas los
cuales hacían darle envidia a todos, esa maldita perra, se creía mucho por ser
mujer que podría aprovecharse de ello para tener lo que quisiera y tener cuanto
pudiera.
Era
de esperarse que se había colado entre las patas del jefe para obtener su
puesto de supervisora, entrando comenzaba a fastidiarme con algunas cuantas
cosas de porcentajes que yo no sabía porque habían salido mal, si bien ella era
al dotada con conocimiento estaba seguro de que era la culpable de los distintos
errores que marcaban, solo que se hacia la tonta esperando a que el jefe solo
notara sus senos en lugar de los errores.
Luego
de eso, me dejo irme a mi casa después de un largo día de trabajo como
habitualmente teníamos, yo ya estaba cansado, esperaba a que llegara el fin de semana
para poder descansar de esa vieja bruja, yo apenas era aún un estudiante universitario,
si tan solo pudiera haber una manera de tener su puesto más rápido para lograr
deshacerme de ella.
Camino
a casa un auto me baño con el charco de agua que estaba en la calle, aun en la tranquilad
de mi hogar seguía teniendo mis pesares con la humanidad, tan solo quería ser
mejor, quería tener el poder de subir lo más alto posible sin problemas y con
toda la comodidad.
Prepare
mi tarea a última instancia de la noche, siendo las 2 am cuando ya podría irme
a la cama a dormir cuando menos unas cinco horas, pero algo pasaba, intentaba
apagar mi computadora, sobre todo por los rayos eléctricos que parecían no
cesar, tenía miedo de que una descarga provocará
que mi computadora estallara, era lo único que tenía para mantener mi trabajo a
salvo, esta aprecia parpadear moviéndose entre una cantidad cuantiosa de páginas
de internet como si esta tuviese vida propia, no fue sino hasta que se detuvo
justamente cuando un rayo golpeó el para rayos de mi casa, por fin pretendía apagar
el dispositivo pero me encontraba en una
página extraña, parecía ser una tienda en línea, pero no era común, esta
mostraba una gran variedad de chicas y de productos, pero como digo, nada a lo
usual, como una consola de videojuegos o una computadora, sino más bien,
collares, anillos, algunos objetos extraños, aunque lo que más llamaba la
atención es que vendieran chicas, pensé que estaría dentro de una red de
prostitución, sin embargo, comencé a leer, una de las chicas decía que ofrecía cambiar
su cuerpo por interés propio, fue entonces que no entendía el propósito de la página,
intente navegar más por ella, pero no me interesaba mucho, ya se hacía más
tarde y no me iba a la cama, pero dije, ¡Que rayos, de todos modos nunca
duermo!, seguí leyendo la página extraña, me adentre a los collares pues no
parecían tan caros, pensaba que quizás si le regalaba algo lujoso a Mónica, la
mujer que me atormentaba a diario en el trabajo, podría ganarme algo de su
respeto y hacer que no fuera tan dura conmigo, aunque lo que decía el collar no
me era de mucho agrado, sino más bien me producía cosquillas, algo de inquietud
y por si fuera poco de morbo.
El
collar decía que podría permitir una
posesión de cuerpo con la víctima o persona deseada, yo pensaba que solo era
una broma, pero si algo era seguro es que la pagina llego a mis manos
extrañamente gracias a los rayos, quizás en otra dimensión esto es lo que se
vende día con día, solo son artículos de fantasía, eso es lo que debía de poder
ser, ya casi amanecía, así que me inscribí en la página con una cuenta falsa
por si las dudas, le proporcione unos datos de mi cuenta bancaria y firme la
compra, de inmediato me fui a la cama para dormir aunque sea dos horas antes de
irme a la universidad.
La alarma
sonó abrumándome como siempre, deseaba ya poder dejar de levantarme tan
temprano, ir a la escuela y tener un
trabajo aparte me estaba matando, me metí
a la ducha apresurado para salir a tiempo y tomar el camión, mientras me vestía
se escuchó un leve golpeteo en la puerta, deje que la persona me esperara y
simplemente terminé de arreglarme, tome mi mochila y me salí para ver quién era
y retirarme de volada, pero cuando abrí la puerta no se encontraba nadie,
simplemente una pequeña caja olvidada en el sueño, la tome analizándola un
poco, pero note el reloj en mi muñeca la cual marcaba la que ya se me había hecho
tarde así que la guarde la caja en la.
El día
paso mientras que terminaban mis clases,
mientras iba camino al trabajo, recordé que había guardado la caja que me
habían llevado esta mañana y me puse a revisarla, abrí el empaque y me encontré
con el collar que había comprado en la madrugada,
me asombre con la rapidez que había llegado, el collar era muy bonito, parecía
que tenía incrustaciones de oro con muchos detalles aztecas, lo guarde de nuevo
en la caja y lo metí a la mochila pues se notaba muy lujoso y no quería que me
lo robaran estando en el camión, llegue al trabajo y una vez más Mónica comenzó
a gritarme, -¡Porque llegaste tan tarde, el trabajo es ahora no para mañana!,
etc., etc., yo solo la ignore y seguí con el trabajo que ya me había marcado, como
siempre una torre de papeleo que seguro se había dedicado a juntar toda la mañana
para hacerme trabajar hasta el cansancio, la tarde se fue de volada, apenas tenía
terminado la mitad de la pila de papeles que me había dado y ya era pasada la
hora de salida, escuchaba como aun con los pocos trabajadores que éramos en la
oficina, Mónica y el jefe seguían haciendo de las suyas, no es que Mónica fuera
una puta, pero realmente parecía serlo a raíz de que los demás compañeros
pensábamos que se dejaba ir tan fácil con el jefe.
Ya
casi no había nadie en la oficina, me faltaba muy poco de papeleo para terminar
aunque ya eran casi dos horas pasados de la
hora de salida, me sentía orgulloso de lo que había hecho pues a pesar
de todo me gustaba dedicar con orden mi trabajo, Mónica llego contoneando
sus curvas de siempre, la mujer poso sus
manos en el frente de mi escritorio y comenzó a burlarse, me estaba fastidiando
por los papeles que me faltaban por ordenar, pero parecía estar de buenas, si
no fuera por el cheque extra que el jefe le había dado jamás me hubiera dejado
salir, como no eran tantos papeles importantes los que me hacían falta, Mónica
me dio carta libre y pude retirarme, antes de eso, ella me encontró en el
elevador justo cuando iba a bajar a la salida, ella por supuesto bajaba un piso
más hasta el estacionamiento donde guardaba su lujoso BMW, pero nadie se
suponía lo supiera, ya que se lo había regalado el jefe hace un año, fue
entonces que aproveche su buen humor para regalarle el collar, aunque parecía más
ser algo incómodo por la situación, a que ambos estábamos solos dentro de un
elevador, la situación se tornó incomoda, me sentía bastante nervioso, pero lo tomé
con calma y unos pisos antes de bajar, tome a Mónica del brazo haciéndola
girar, -¿Qué te pasa imbécil?, -¡Eh!, no nada, discúlpeme señorita, es solo
que…, -¿Qué, que pasa?, dime de una vez, -Bueno yo, solo quería regalarle esto,
extendí la mano con la caja en mis manos mentas que Mónica la tomaba con
rabieta, pronto comenzó una nueva discusión que fue más perversa de lo normal,
-¿Me quieres coger niño? –era su primera respuesta-, -¡Qué, no yo este no para
nada!, le decía tímidamente, aunque no lo había pensado la verdad es que Mónica
estaba muy buena, me excite por un momento ante el nerviosismo de la metida de
pata que había hecho, ya que en todos lados hoy en día un regalo y más a solas
en un elevador puede causar muchos malos entendidos, con toda la esperanza del
mudo intente explicarle el porqué de mi regalo esperando a que lo tomara para
bien, Mónica sonrió notando lo estúpido que era a darle cosas, ella un pensaba
que quería coger con ella, aunque no se lo tomaba tan mal, -No, yo lo que
quería era demostrarle mi aprecio ante el trabajo que me ha dado, no importa
que sea mucho el esfuerzo, con el dinero me ayuda a pagar mis gastos etc., -Jajaja, no te creo,
pero bueno, ya sé que me doy a desear, lo último que espero es que alguien no
pretenda coger conmigo, tu no estas nada mal, si quieres podríamos hacer algo,
aunque necesitarías más detalles muchos más detalles caros que esta simple
baratija para poder llevarme hasta la cama, -decía arrimándose sobre de mi-, Mónica
se alejó empujándome del elevador a la salida, ella se fugó con el collar
dejándome entorpecido por sus encantos tan seductores, pues aún tenía que bajar
hasta el sótano por su auto.
Seguí
mi camino a casa, aunque ciertamente ya estaba bastante oscuro, tome el camión
mas cercan a la ruta de mi colonia, pero más tarde que temprano me di cuenta de
que había sido un grave error, dentro del camión se encontraban dos tipos
ocultos en las sobras hasta el fondo, pude mirarlos aun con la buena visión que
mis ojos poseían a pesar de los constantes desvelos, no había nadie más en el camión
así que intente estar cerca del chofer todo lo que quedaba de camino, me baje
una parada antes de llegar a mi casa pe son quería que intuyeran el lugar donde
vivía tan sol para despistarlos, lo cual fue peor de lo que imaginaba, pues
estos se habían bajado por detrás sin que yo lo notara, pronto, uno de ellos se
acercó a mí, mientras que el otro vigilaba por detrás, pronto intentaron
sacarme entre los dos el dinero, pero no tenía mucho que ofrecerles más que
cien pesos, por lo que terminaron golpeándome ante su frustración, parecían
estar drogados y solo querían desquitarse por no tener el dinero para pagar sus
adicciones, un golpe tras otro que recibía y finalmente sentí como una navaja
era incrustada en mi espalada baja, el dolor era intenso y ellos me seguían golpeando
hasta que alguien llego provocando que escaparan, sentía como mucha sangre corría
de mi cuerpo, mi corazón se aceleraba y no entendía lo que pasaba, veía manchas
borrosas de personas que se acercaban pero no podía hacer nada, finalmente sentí
como mi corazón se paralizo al igual que el resto de mi cuerpo, sentía un
intenso frio como de muerto, notaba como me quedaba mirando hasta la nada pero
no parecía estar muerto, sino más bien algo me hizo quedarme dormido hasta que
algo extraño paso.
Me encontraba
de pronto en frente de un espejo, pero parecía que miraba a otra persona de
frente de mí, lo más extraño es que era Mónica a quien yo veía, pensaba que la
tipa a pesar de tener un corazón duro se había preocupado por mí, quizá por mi
regalo o de verdad ya me tenía cariño, pero pronto note que no podía moverme,
solo tenía unas extrañas sensaciones como si mi cuerpo se moviera por su cuenta
pero no era yo quien lo controlaba, miraba a todos lados e inclusive a algunas
partes que no reconocía de mí mismo, pronto un par de pensamientos recorrieron
mi mente, como su estos se cruzaran con los míos, se escuchaban con la voz de Mónica
pero no veía que esta hablara, se encontraba mirando al espejo arreglándose
para irse al trabajo, pronto me ofusque recordando que me encontraba
desangrándome en el suelo, pero no podía air a ninguna parte, era como si una
fuerza extraña me obligara a permanecer inmóvil, pronto me di cuenta de que no
estaba en mi cuerpo, si no en el de Mónica, estaba dentro de su cuerpo, podía escuchar
todo lo que pensaba y saber todo lo que hacía, era como una especie de huésped
oculto dentro de su cuerpo, pensé que podría controlarla pero no podía, aun seguía
controlando ella su propio cuerpo, se había terminado de arreglar, pronto el
estar en esa posición no me parecía tan mal, pues era como si fuera Mónica,
miraba a Mónica desde su propio cuerpo miraba sus tetas cuando el a bajaba la
mirada sin querer, no tenía que pedírselo ella misma me los mostraba al revisar
si su escote estaba bien expuesto ara seducir al jefe con su vestimenta,
comenzó a moverse para irse al trabajo,
yo sentía como si fuera ella misma estand dentro de su cuerpo, aun no entendía
como había terminado dentro de ella, me preocupaba pensar que mi cuerpo se encontraba
en alguna parte luchando por mi vida, mientas que yo estaba atrapado en el cuerpo
de Mónica.
Comencé
a pasar el tiempo dentro de Mónica, mientras que todo tomaba su curso como
normalmente ella lo hacía, estaba en el trabajo siendo que yo a esta hora en la mañana debía de estar en la
universidad, aun me preocupaba el hecho de que mi cuerpo estuviese herido en el
alguna parte, pero no era así, poco después de ver todo lo que hacía Mónica, un
par de veces dándome cuenta de cómo ella sentía sobre de ella las miradas de
muchos de mis compañeros del trabajo que posaban sus ojos en sus atributos de
una forma grotesca y pervertida, a sabiendas de que yo lo sabía y de que
conocía a muchos con los que hablaba sobre el cuerpo de Mónica y lo puta que
era con el jefe para que no llegaba y obtener su puesto.
Yo
me encontraba dentro de Mónica mirando todo lo que hacía desde su perspectiva, desde
el trabajo que realizaba, hasta de ver mensajes con hombres con lo que texteaba
a cada rato, ya sea de algo pervertido o romántico, hasta lo simple como un
amigo o amiga con la que hablaba de chismes, yo quería respuestas de lo que
había sucedido conmigo, se estaba haciendo tarde, la hora de llegada en la que
entraba a trabajar estaba cerca y no había noticias de mí, hasta que Mónica comenzó
a pensar en mi pero de forma malévola porque no
llegaba y ya quería comenzara a mandarme con trabajos pesados, todo lo sabía
porque mientras ella pensaba yo escuchaba en su mente, hasta que una llamada hizo
que el jefe le gritara a Mónica de forma desesperada para que ella fuera a ver
con urgencia lo que sucedía, toda la oficina se quedaba atonto de los gritos
del jefe, sentía como Mónica temblaba un poco
de los nervios al igual que sentía su cuerpo moverse, me daba cuenta de
que cada vez más sentía el cuerpo de Mónica como si fuera mío, pensaba que
estaría tomando por fin el control de su cuerpo, miraba sigilosamente a los
pechos de esta mientras caminaba apresurada cuando estos se movían de lado a
lado asomándose en su escote.
El
jefe tono a Mónica de la manos y con los ojos algo llorosos, sin yo imaginarme
si quiera que el jefe tuviera algo de estima o de sentimientos, nos dio la
terrible noticia de que yo acababa de morir hace unas horas luego de un intento
de robo la noche anterior, yo estaba conmocionado, escuchaba la mente de Mónica
penar en que no le importaba mucho la
causa de mi fallecimiento, casi como si no tuviera remordimiento alguno, o
compasión por haber sido su empleado, sin embargo, algo la estaba haciendo cambiar,
yo estaba muy triste al haber escuchado la noticia, ahora no podría hacer nada
por mi vida, pues estaba atrapado dentro del cuerpo de Mónica, escuchando y
mirando todo lo que sucedía a mi alrededor, tenía mucha frustración dentro de mí,
quería llorar, quería tirarme al suelo a llorar, sin saber por qué esta en esta
situación, ni porque me tenía que pasar todo esto a mí, luego de que había
luchado todos estos últimos años por tener un bue futuro, desperdicie los
últimos años en ello para nada, solo paras que un simple par de malandros me apuñalaran
sin remordimiento y me dejara sin vida en el suelo, sin darme cuenta, Mónica
estaba consternada, dentro de ella algo estaba cambiando hacia el exterior,
pronto sus pensamientos de desigualdad estaban cambiando a pensamientos de
tristeza y compasión, escuchaba como se preguntaba por mí de manera preocupada,
en que si ya no me volvería a ver y que pasaría con el puesto que estaban
alistando para mi luego de tanto esfuerzo, sentía como desde nuestros ojos
estaban comenzando a brotaron par de lágrimas que poco a poco se desliaban en
nuestro rostro, lo digo así porque al estar dentro de Mónica podía asimilar
que ahora yo ocupaba su cuerpo y por lo
tanto era nuestro propio cuerpo, todo esto me llenaba de una gran caída emocional,
pronto Mónica estallo en cólera tirándose al suelo doblando sus rodillas de los
nervios, sus ojos escurrían el triple de lágrimas hasta parecer que estaba
sufriendo en carne propia el dolor que solo yo o mi familia podía sentir, el
jefe se extrañó demasiado ante la conmoción que mostraba Mónica pero asintió,
la toma intentando consolarla pues el pobre hombre ingenuo creía que su relación
con ella era de mero amor y respeto, pero ella se dejó consolar por el abrazándose
juntos, yo solo podía pensar en que ahora me quedaría así para siempre, mirando
todo desde el cuerpo de Mónica, tenía rabia y frustración, no entienda por qué había
pasado todo esto, el jefe soltó a Mónica intentando limpiar sus lágrimas, luego
de eso, envió a Mónica a su casa para descansar en lo que el avisaba a todo el
personal pues sin saberlo yo muy querido en la oficina, salvo a uno de mis
compañeros que desde que llegue suponía le caía algo mal, todos se
entristecieron por la noticia y de igual manera se retiraron a sus casas a descansar.
Mónica
nos llevaba devuelta a su casa, arrancó el BMW y con algo de calma siguió el camino,
yo intentaba de igual forma reincorporarme, pero el dolor y la angustia de mi familia
no me dejaba, llegamos a casa de Mónica, a pesar de la asombrosa mirada
del camino dentro de ese carro deportivo
no me ayudó mucho en calmar mi depresión post muerte, era como un espíritu encadenado
a un cuerpo, salimos del auto, mientras que sentía las emociones de Mónica
desmoronándola cada vez más, pensaba que al estar en su cuerpo mi tristeza la
afectaba tanto como para cambiar su actitud, Mónica entro a su casa, sentía el caminar de sus tacones que molestaba
ya sus pies, ella se tiró en el sofá de su sala quitándose los cansados tacones
que ya le habían agotado todo el día, intento calmarse pues la tristeza que inundaba
su mente no la dejaba en paz, se abrió la blusa para refrescarse, miraba un
poco de sus pechos pero la vista no podía contener mi desesperación, quería ver
a mi mama y abrazarla, pero no podía, Mónica miro hacia el baño, se levantó del
sofá caminando hasta el baño donde se desvistió por completo, era la primera vez
en todo el día en que podía verla completamente desnuda, ella se miraba en el
espejo, su rostro mostraba manchas por todos lados luego de correrse el
maquillaje por las lágrimas que le había
ocasionado ella se limpió, después se sentó en la taza e hizo algo de
sus necesidades extra corporales de las cuales me quedé asombrado, sentía como
de mi nueva vagina o de su vagina escurría liquido de la orina que expulsaba, me sentía tan caliente
e ese momento que había ocasionado que Mónica se calentara junto conmigo,, solo
escuche un leve gemido que ella bloqueo con sus manos algo sorprendida por sentirse
así, hasta ese momento pensaba que podía ocasionar algo en Mónica, quizás
podría controlar su cuerpo poco a poco, ella se levantó limpiando su zona
intima para después poner la ducha, salimos del baño hasta el armario que por
cierto era muy grande, comenzó a elegir un par de vestidos de color negro de
los que abundaban en su armario y unos zapatos de tacón bajo negros, no me daba
cuenta de que estaba preparándose para ir a mi sepelio, quizás me haría caso a
mis plegarias de querer ir con mi madre y abrazarla pero intentaba poner más empeño en las decisión es que causa en ella, poco a poco Mónica siguió mis
pensamientos, estaba conectando con ella sin mostrar evidencia de que me
encontrara en su cuerpo, Mónica se meto
a la ducha mientras que yo podía ver
todo desde su cuerpo, me impresionaba lo increíble que se veía la vista desde
la perspectiva del cuerpo femenino, las sensaciones que me transmitía el cuerpo
de Mónica me provocaban una gran satisfacción y placer, deseaba mucho poder poner mis manos en sus pechos para
acariciarlos, pellizcar sus pezones y hacerla gemir, poco a poco Mónica empezó
a descontrolarse, sin darse cuenta coloco sus manos en sus pechos obligada a
hacer lo que yo me había imaginado con ella sin presenta molestia alguna, tan
solo pensaba que su mente le había permitido darse esos placeres, lo cual provoco
en mi conocer un gran mundo de placeres inimaginables los cuales provocaba en Mónica
para ambos, deje un poco en orden la situación para ir con mi mama, Mónica comenzó
a arreglarse, se probó el vestuario que había elegido para verse frente al espejo
si todo estaba bien, miraba nuestro cuerpo observando lo increíble que lucía la
silueta de Mónica, si bien no era la más bonita ni una modelo pero estaba muy
buena, miraba desde sus ojos analizando todo nuestro cuerpo hasta que me di
cuenta de que traía puesto en el cuello el collar que le había regalado el día de mi muerte, me quede asombrado pensando en
que quizás esa era la razón por la que me encontraba en su cuerpo, lo cual solo
me hacía pensar en que me había salvado la vida de alguna manera, luego de eso,
intente hacer unas pruebas para saber si podía controlar completamente a Mónica,
ordenaba levantar sus brazos a lo cual ella lo hacía solo un poco después sin ningún interés del porque lo
haba hecho, ponía sus manos en sus pechos apretándolos para ver cómo se veía la
silueta de estos en su escote, pensaba que era como un huésped el cual podía darle
órdenes a mi completa voluntad, luego de
eso, nos gire para irnos a nuestro sepelio, quería con muchas ganas ver a mi
mama, ahora que sabía que una parte de mi aún se encontraba con vida y podía
usar a Mónica como intermedio para despedirme de mi madre, nos subimos al auto y
conducimos hasta llegar, ahí se encontraba toda mi familia esperando con tristeza
la hora del entierro, el jefe también había llegado con algunos de nuestros
compañeros, incluyendo a Kevin, el chico que le caía mal, el me miraba, mejor
dicho miraba a Mónica pues como siempre se había vestido tan provocativamente, Mónica
se sonrojo y le mostro una risita falsa, pero dentro de mi sentía que se había
apenado y abochornado, intente que Mónica buscara a mi madre para abrazarla,
aunque el jefe me tomo del brazo un momento solo para consolarnos, yo estaba
angustiado, quería darme prisa antes de que no pudiera verla más, le ordene a Mónica
soltarnos del jefe e ir en busca de mi madre, Mónica jamás la había visto pero
gracias a que yo le indicaba todo pudo llegar con ella, solo miraba como mi
mama estaba deshecha sobre mi ataúd, yo también comencé a sentir una fuerte
presión por la situación, mirarme a mí mismo dentro de un cofre, ver mi
cadáver, eso me provocaba un fuerte nudo en la garganta, mi madre estaba por
caerse pero logre tomarla abrazándola, parecía como si ella sintiera algo
dentro de Mónica, que rápidamente la abrazo con gran cariño, Mónica comenzó a
llorar asintiendo mis emociones de tristeza al sentir a mi madre en brazos
pegada junto con nosotros, pronto todo
parecía volverse un mismo universo entre los tres, ella nos soltó mirándonos
con desilusión, pues no miraba a su hijo si no a Mónica, pero aun así la tomo
de la mano llevándonos hasta un sillón junto con ella, platicamos un poco de
rato donde sol deje que Mónica dialogara con ella, yo indicaba algunas cosas
que decirle sin que sospechara que me
encontraba en su cuerpo y terminara todo, yo insistí en quedarme junto con ella
toda la noche para cuidarla, paso el tiempo hasta que todo había terminado
hasta m entierro, donde por última vez me vería
con mi madre al menos si lograba visitarla e otra ocasión, fue una despedida muy conmovedora pero fuerte,
nos abrazamos por ultima vez y luego de despedirnos comencé a llorar desde Mónica
junto con ella, subimos al auto y nos fuimos poco a poco del lugar.
Luego
de un tiempo, permanecí callado y sin interés dentro de Mónica, el verla todo
el tiempo portando su cuerpo me dejo de
llamar la atención por un tiempo, no quería hacer nada, poco después intente
reponerme, el cuerpo de Mónica llamaba mucho la atención, además de que cuando estaba
por tener relaciones con el jefe, me daba algo de asco y sin quererlo obligaba
a Mónica a alejarse del jefe, también notaba como ella no era tan lista como
aparentaba, se equivocaba en muchas ocasiones las cuales yo terminaba salvando
gracias a mi inteligencia, también a los empleados que trataba mal como a mi
comencé a provocar en Mónica que los tratara
mejor, todo parecía estar mucho
mejor en la oficina, a pesar de todo, no se veía tan mal que estuviera
dentro de Mónica, podía hacer todo lo
que alguna vez soñé con el poder que tenía sin tener que esperar más, quizás
tendría que abrir en alguna ocasión las piernas de Mónica para que el jefe me
siguiera teniendo consideraciones pero no podía en este momento asimilarlo, yo prefería
a las mujeres por lo que poco a poco sin quererlo obligaba a Mónica a ver sus
propios pechos en medio del trabajo como modo de distracción, aprovechar que
estábamos solos en la oficina para abrir el escote de la blusa y distraernos
tocando nuestros pechos, poco a poco la Mónica
que antes conocían estaba dejando de existir, ella se extrañaba algo de hacer
lo que muchas veces se impedía a si misma por más extraño que le pareciera,
ella sabía muy bien qué hacer cuando le convenía y ahora solo hacia el bien,
comencé a cambiar totalmente el estilo de vida de Mónica, cuando los hombres me
hablaban por mensaje los ignoraba a pesar de que Mónica recibía muchas
atenciones por ello, intentaba hablar más con las mujeres pues me interesaba
más que pensar en hombres, en el trabajo sin quererlo miraba con sus ojos a las
demás chicas, mientras que ellas no lo sabía y al darse cuenta se apenaba, pero
las demás chicas solo parecían verme a mí
por envidia y sin imaginar
que un hombre dentro de Mónica las
miraba con bastante perversión, regresaba a la oficina de Mónica tan solo para
tocarme pensando en diversas situaciones con las demás compañeras de la oficina,
inclusive poco a poco intente forjar una relación con algunas de ellas las
cuales por el mismo interés de un mejor puesto
no se negaban ante mí, sin darnos cuenta, Mónica y yo nos estábamos fusionando,
poniendo más de mí mismo que de usar lo que existía de Mónica en su cuerpo,
ella parecía acomplejarse más a mi esencia mientras que ella se desvanecía,
cada vez más obtenía un mayor control sobre de ella, ya podía sentir más la
sensibilidad de su cuerpo como si fuera mío, estaba bajo mi control y ahora
podía hasta moverme sin tener que
pedírselo, ella estaba desapareciendo mientras que yo me quedaba con su
cuerpo.
Todo
parecía estar muy bien, había dejado atrás todo lo que había pasado en los
últimos meses, me estaba acostumbrando más al cuerpo de Mónica y a mi nuevo
trabajo, se sentía tan bien ser la líder
de la oficina más que como la puta del grupo, ya notaba cada vez más respeto
hacia mí que como antes cuando todo el mundo odiaba a la maldita puta de Mónica,
ahora era para todos la señorita Mónica, era la trabajadora y la mejor de la
oficina, el jefe también aunque molesto con mi rechazo sexual de los últimos
meses prefería más ver lo bien que trabajaba, disfrutaba así de una cena
amorosa conmigo las cuales si le concedía solo para mantener las cosas en paz, él
lo aceptaba sin rencores pues además tenía esposa y le había hecho entrar en
razón que esto entre los dos estaba mal, úes debía de pensar en su familia,
todo cambiaba de manera radical en Mónica, yo ahora era Mónica al 100%, aunque
para mí el hecho de ahora ser mujer me costaba un poco más al padecer por sus
periodos cada mes, o al sentir el acoso que aún me daban los hombres, al igual
que algunas envidias de mujeres pero
todo era sobre llevado, el que aun sentía que tenía rencores conmigo inclusive
siendo Mónica era Kevin, del cual estaba sospechando demasiado luego del último
mes, él era encargado de la oficina de contabilidad, y por los recuerdos de Mónica
pude saber que quería el puesto que yo obtendría luego de que Mónica me diera
mi ascenso dentro de un año, solo que él estuvo luchando por dos años antes que
yo para lograrlo, un día, Kevin se quedó hasta tarde, yo aun terminaba un
trabajo mientras que todos los demás ya
se habían retirado, parecía estar esperando algo, pero yo no me intimidaba, ya estaba
por terminar cuando en eso Kevin llego tocando ya abriendo la puerta sin demora
en mi oficina, fue cuando me sorprendí al ver como este con las manos mostraba
los puños cerrados se acercó a mi escritorio cocándolos con despecho, de pronto
todo se volvió sombrío dentro de la oficina, el temor comenzó a invadirme, algo
que no había sentido desde mi lamentable muerte, notaba como desde hace tiempo
me miraba tanto perversa como despectivamente, solo que ahora estaba
desprotegida, era una mujer sola sin nadie que me pudiera ayudar y los guardias
del edificio solo se encontraban en las entradas, podía tocar la alarma pero
eso sería demasiado tonto como para intentarlo, el me atraparía, de un momento
a otro, Kevin comenzó a reírse sínicamente, poso si mirada frente a mí, bajando
hasta mis pechos descubiertos por mi escote, pues me gustaba vestir siempre
sexy a pesar de todo, poco después de intentar sobrellevar la situación, el
inicio la conversación, -¡Tu, tu maldita perra!, desde hace tiempo que por tu
culpa no logre el puesto que deseaba, como es que me amabas tanto a escondidas
del jefe y jamás me diste la oportunidad, tenía que llegar ese maldito
escuincle para arrebatarme todo, por eso lo mande matar aquella noche fingiendo
un robo, las palabras de Kevin resonaban mi mente, aturdiéndome un poco de
manera escabrosa, - ¿Tu, tu, mandaste asesinarlo? –preguntaba con la voz entrecortada-,
- ¡Hay, pero si no finjas que no lo sabias!, yo te dije que ese puesto era mío
y haría todo para que nadie me lo quitara, las emociones subieron al mil dentro
de mí, pensaba que Mónica había sido su cómplice, estaba tan aturdido como para pensar en una solución a todo esto,
lego Kevin se acercó a mi
vertiginosamente, empezó a tomarme de los brazos con fuerza poniendo sus labios
en mi cuello bajando hasta mi pechos desliando sus manos para apretarlos con
fuerza sometiéndome, él me decía que esto me gustaba hace unos meses cuando deje
de frecuentarlo, la verdad jamás había investigado dentro del cuerpo de Mónica
si haba tenido algo que ver con Kevin hasta que me entere hace un momento, sus
besos y caricias me hacían sentir
asqueada, pero por dentro la aun sensibilidad de las emociones de Mónica me hacían
sentirme la mujer que debía de ser para Kevin, ella estaba enamorada del antes
de que yo llegara a su cuerpo, tenían todo un plan para derrocar al jefe y
quedarse con la empresa, pero leyendo
los recuerdos de Mónica eso solo parecía ser más el plan de Kevin quede ella,
inclusive, no sabía que el chico mandaría
a asesinarme solo por su obsesión de poder, yo había llegado con un mejor
nivel, para ocupar el puesto que necesitaba el jefe, inclusive Kevin me reclamó
el que haya tenido el dueto que pudo haber sido de ambos pensado que como
siempre había sido una puta con el jefe ocultamente mientras que todos en la oficina
me veían como la diosa, la amable y la que todo sabia, no entendía cómo es que le
habían dado el puesto a una puta como yo sin conocimientos en el tema, pero a
verdad es que gracias a mi es que logre
tener el puesto que desde antes me pertenecería, había hecho que monoica
olvidara poco a poco el amor que sentía hacia Kevin poniéndole intentes en las
mujeres, con las que ella había tenido
relaciones en las últimas semanas, le había dejado claro a Mónica que a la
nueva Mónica ya no le interesarían los hombres, ahora yo ordenaba en Mónica y
yo mismo seria Mónica, Kevin me seguía desnudando a punto de violarme, yo
estaba aterrada, no quería pasar a algo más con un hombre y menos de esa forma
al parecer estaba más obsesionado que nadie en cogerse a Mónica, quien también
le había negado abrirle las piernas desde antes de que yo llegara pues solo se
las abría al jefe, Mónica le había impuso a Kevin que hasta que no consiguiera mejor puesto para darle
una vida a ambos no le cedería las puertas abiertas de su vagina, lo cual me hizo
enojar mucho más pues el solo quería eso de mí, pero no le dejaría, intente tomar
lo que estuviera en mis manos, tome un jarrón de flores que alcance gracias a
la flexibilidad de mi nuevo cuerpo y lo arroje sobre la cabeza de Kevin
dejándolo inconsciente, intente reponerme de su ataque volviéndome a vestir
tapando lo importante para que quedara evidencia suficiente de que este intento
violarme, afortunadamente había pensado en todo y había colocado cámaras de
seguridad en la oficina por cualquier cosa, luego de aquel incidente quería
estar mejo prevenida, quizás aun pensándolo bien, el que todos vieran el video
traería repercusiones a mi actual vida, pues yo no era Mónica, pero como si o
fuera no podría explicar que era otra persona actualmente habitando su cuerpo y
no la Mónica que hizo todos esos planes
contra de mí mismo junto con Kevin, tome la mejor de las decisiones, intente recordar
más cosas de las que Mónica hacía con Kevin, armando todo un plan para que
lograra desvincularme con él y sus planes, todo para salir bien librada y como
una héroe, afortunadamente mi sorpresa ante la orden de Kevin por mi mete había
sido suficiente para impedir que me involucraran como su cómplice además de los
demás actos ilegales que había hecho en contra de la empresa, el jefe y los demás
compañeros e agradecieron, e inclusive el jefe me otorgó un nuevo asenso gracias a mí, pues de no haber
cambiado todo lo malo que había en Mónica las personas no hubieran creído en mí,
todo funciono como el mejor de los
planes pues pude lograr que creyeran que antes era así para descubrir a Kevin,
que la verdadera y bondadosa Mónica actuó en los últimos meses para
desenmascararlo y ser la gran persona que debía de ser con todos, al final mi
vida había cambiado para bien, me gustaba mi actual vida sin importar el costo
u el sexo que debía de tener para lograrlo.
Desde ahora puedes darle me gusta a las publicaciones, aquí abajo encontraras las reacciones, espero tu reacción en la barra de abajo.
¡No olvides comentar y dar tu reacción en la parte de abajo!
-No es visible tu perfil o tu nombre solamente indicara un numero en el tablero no tu imagen pública-
-También puedes seguirme en la parte de más abajo si estas en modo móvil, si estas en tu computadora o en tableta en la barra lateral de tu derecha encontrarás los seguidores gracias-
-No es visible tu perfil o tu nombre solamente indicara un numero en el tablero no tu imagen pública-
-También puedes seguirme en la parte de más abajo si estas en modo móvil, si estas en tu computadora o en tableta en la barra lateral de tu derecha encontrarás los seguidores gracias-
Me gusta ;)
ResponderBorrarEstuvo muy buena esta entrada ~aka
ResponderBorrarMuy buena historia ~G~
ResponderBorrarMe encanto la historia, pasara a ser de mis favoritas lo juro
ResponderBorrarEstas historias siempre me encanatan
ResponderBorrargran selección de imagenes
ResponderBorrarIncreíble ;v
ResponderBorrarDe mis favoritas hasta ahora la verdad.
ResponderBorrarPuedes hacer una historia con tematica de esclavitud,seguramente te queda genial
Interesante como siempre.
ResponderBorrar-confused
Muy buena historia, me encantan las de este tipo
ResponderBorrarMe encanta cuando haces historias tan buenas, con una extensión considerable y autoconclusivas, muchísimas gracias Karina :3
ResponderBorrarMe ha encantado.
ResponderBorrarMuy bonito.
Muchas gracias por compartirlo.
Saludos.