La semana de la salud 1 -El caso de Karen-

Como parte de la formación y apoyo entre los blogs, Siesta y yo iniciamos una semana de la salud, donde expondremos diversos casos de Clínic Swap, si tienes alguno que quisieras exponer puedes hacerlo en los comentarios, pero solo si se trata de una Clínic Swap.

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Despertaba luego de haberme quedado profundamente dormida del trabajo que nos dio con las tareas ese inutíl desvalido del señor Henkins, siendo mi cuerpo al que vi con sorpresa sentado en el sillón de la oficina del mismo, el miedo se apodero de mi mientras intentaba moveme si excito alguno, mi cuerpo frente a mi comenzó a soltar unas leves carcajadas, sujeto con la mano un cigarro que luego de encenderlo lo intodujo en su boca  para saborearlo.

-¡Hola lindura, oh, veo que ya despertaste!, bueno, ha que rico se siente moverse de nuevo, sobre todo el sabor de este delicioso cigarro que tenía guardado en mi escritorio  luego de ya varios años, pero creo que usted no puede nisiquera decir una sola palabra ¿cierto señor Henkins?

La persona que fuera la que estuviera portando mi cuerpo comenzaba a asustarme, de alguna forma se había adueñado de el trastando de fastidiarme, notaba una diferencia que era la de llamarme señor Henkins cuando yo era Karen y ese tipo tenía mi cuerpo.

-Verás, la razón de estar aquí es que veas que yo soy el nuevo dueño de tu cueerpo, ¡Siii, así es!, yo soy el señor Henkins, ¡acertaste pequeña Karen!, tanto te gustaba burlarte de mi, pero te hacías la  víctima con las tareas o te aprovechabas de mi gradtitud solo para intentar sacar buenas calificaciones seduciendome, bueno, ahora eres tu quien no puede moverse ni decir una sola palabra, hace años que mi cuerpo quedo en ese estado, la escuela aceptó conservar mi contrato, cuando me enteré de la fantástica clínica de intercambio  no dude en intentar comunicarme para hacerme de un nuevo cuerpo, con ciertos engaños cibernéticos controle el sistema ganandome un cambio de cuerpo contigo por la noche gracias al modo aleatorio, la clínica envió a sus hombres en busca de tu cuerpo inconsiente mientras que  a mí  me llevaron sin oponer resistencia, nos llevaron a la máquina de intercambio y nos regresaron justo al amanecer para contemplar el maravilloso espectáculo, te  agradezco por tan maravilloso cuerpo que me has dejado, solo te recuerdo tomar tu medicina a la hora que debes o si no tu corazón se paralizará como el resto de tu cuerpo ocasionandote una muerte instantánea, te dejo la vista de tu hermosa vagina por última vez y te deseo suerte con tu nuevo modo de supervivencia querida Karen. 

Yo me sentía tan indefensa, el tipo se había hecho de un plan lo suficientemente bueno para lograr robarse mi cuerpo, yo misma podría hacerlo y arrebatarle lo que me quito si tan solo tuviera una minima experiencia para moverme usando la poca capacidad que mi nuevo cuerpo me ofrecía, pero era inutíl, el pánico que había dentro de mi destruyó la última esperanza de recuperar mi cuerpo, no sabía manejar los modernizados aparatos tecnológicos del señor Henkins y como el me lo advirtió, moriria dentro de poco, luego de eso sin nadie que llegará por siquiera casualidad, mi corazón comenzó a detenerse, experimente una caída emocional luego de un fuerte dolor en el interior que anunciaba la aproximación de mi muerte, el señor Henkis se había salido con la suya llevandose mi cuerpo, contoneandose con mis curvas y una sonrisa estirada de lado a lado, saboreo una última vez su cigarro y me dejo sola hasta el final de mi muerte.