Intercambio de partes con la vecina

Nayeli se estaba dando un baño muy a gusto cuando de repente sintió como sus pechos comenzaban a reducirse manteniendo un conflicto de equilibrio dentro del baño, luego noto como un largo miembro salía de su entrepierna grotescamente erecto mientras que palpitaba expulsando semen obligándola a sentir un par de orgasmos no tan intensos que duraron muy poco, luego de la escena tan asquerosa, Nayeli levanto su miembro notando como este poco a poco palpitaba regresando por dentro dejando solo un pedazo de carne proporcionalmente descubierto de su nuevo miembro, -¡Porque tengo un pene!, mis senos se han ido –decía la chica palpándose el cuerpo sintiendo impotencia, revisaba la regadera para asegurarse de que el agua no le había hecho cambiar a propósito, quizás algo en el agua pero no hubo nada más haya de simple agua, salió del baño asegurándose de seguir siendo ella misma y salvo la falta de su senos y la aparición de un gran miembro en lugar de su vagina todo estaba bien, intento vestirse pero su nuevo miembro le estorbaba levantándose constantemente como si este tuviera vida por sí mismo, la falda no se le vería bien y por supuesto que sus pantalones y shorts cortos solo complicarían mas la comodidad del asunto, fue a la habitación de su hermano y tomo un par de pantalones que le quedaban grandes con un par de boxes para asegurar mejor la comodidad de su nuevo amigo, luego de eso, por primera vez no tuvo la necesidad de sentirse incomoda por un sujetador que amortiguara sus grandes y pesadas tetas y simplemente noto como su blusa se quedaba aguada sin nada que mostrar en el pecho, -¡Parezco un fenómeno! –decía refutando los hechos en la calle, luego de eso, llamo a su mejor amiga para que la recibiera en su casa  y contarle todo, cuando escucho desde la calle como un par de gemidos desde la habitación de su vecino se escuchaban hasta la calle, -¡Maldito pervertido, podrías ser menos grotesco, la gente te está escuchando animal! –le gritaba Nayeli desde la calle, -¿Desde cuándo los hombres tienen orgasmos y gemidos tan fuertes? –se preguntaba Nayeli pero no se había tomado la molestia de esperar a averiguarlo y siguió su camino hasta casa de su amiga.

Tom estaba en su habitación, su nuevo equipo estaba siendo una experiencia muy deliciosa para sus instintos animales, tomo su nuevo par de tetas las cuales aparecieron dándose forma en su pecho una vez iniciado el hechizo y mientras se masturbaba su miembro dejaba de crecer para encogerse y dejar en su lugar una vagina, Tom había conjurado el hechizo de cambio de partes sobre las partes de su vecina Nayeli, una vez terminado, Tom no podía creer que de verdad hubiera funcionado, tomo sus grandes nuevas tetas y las amaso tan gustoso mientras que experimentaba una nueva serie de orgasmos que su vagina liberaba.