lunes, 25 de mayo de 2020

Las perversiones de mi vecina







HabĆ­a visitado a mi vecina, la mujer me habĆ­a pedido que fuera para ganarme algo de dinero por ayudarla con su casa, cuando llegue ella me abriĆ³ muy feliz y al entrar me pidiĆ³ que fuera con ella hasta su cuarto, yo estaba algo inquieto imaginĆ”ndome cosas pervertidas con ella a solas en su casa, nada que no se imaginara un chico de mi edad morboso mirando a una mujer tan madura y sexi como ella, cuando entramos a su cuarto lo primero que  me imagine serĆ­a que querĆ­a tener sexo conmigo, poco despuĆ©s me llego por la espalda desnuda con un extraƱo collar mientras me alejaba algo nervioso, luego me dijo que se lo pusiera en el cuello a lo que accedĆ­ experimentando un extraƱo giro de las cosas, de repente me miraba a mĆ­ mismo desde otro Ć”ngulo justo cuando sentĆ­ como mi cuerpo habĆ­a cambiado, mire mis nuevas tetas colgando de mi pecho seguido de voltear a ver hacia un espejo y notar mi nueva apariencia, luego regrese a mirar como ella se entretenĆ­a con la escena mirĆ”ndome en mi cuerpo y rĆ”pido hice fuerza para intentar quitarme el collar del cuello  para regresar a mi cuerpo, -¡Porque no me lo puedo quitar, ya devuĆ©lveme mi cuerpo maldita! –gritaba desesperado tratando de regresar a mi cuerpo, la mujer en el me sonriĆ³ y solo se rio tomando mi viejo miembro mientras se masturbaba con gozo y perversiĆ³n, luego se parĆ³ frente a mi empujĆ”ndome contra la cama cayendo y rebotando con todo lo que tenĆ­a mi nuevo cuerpo por todos lados, ella se rio y me sometiĆ³ abriendo mis piernas frotando mi vagina y luego penetrĆ”ndome fuertemente provocĆ”ndome chillar y brincar a la vez de un fuerte placer, luego de venirse dentro, ella se alejĆ³ y se escondiĆ³ en el armario mientras trataba de limpiarme la vagina de sus deshechos seminales, justo cuando trate de irme sobre ella su esposo llego mirĆ”ndome en la puerta del cuarto, tenĆ­a los ojos grandes y vistosos sobre mĆ­, pronto tenĆ­a miedo, sabia porque me miraba de esa forma, baje la mirada a mis grandes tetas y las sostuve  por unos segundos antes de que el hombre comenzara a desnudarse y a tirarse sobre mi hasta la cama, -¡No, no espera, yo no soy…! –fue entonces que me calle pues si le decĆ­a capaz que ni me creĆ­a y asesinaba mi cuerpo antes de volver, Camila la vecina se encontraba en el  armario con mi cuerpo desnudo y si la encontraba serĆ­a la primera en sufrir las graves consecuencias del coraje de su esposo, el comenzĆ³ a besarme por todas partes  y luego con sus manos sujeto con fuerza mis grandes senos hasta hacerlos sacar leche, sentĆ­a todo tan terrorĆ­fico y delicioso que no pude contenerme, estaba echando un orgasmo tras otro mientras sentĆ­a como su miembro grueso me penetraba, me tomo del cuello y comenzĆ³ a apretarme sintiendo que me ahogaba pero en vez de asustarme me excitaba, pronto Ć©l se vino dentro de mĆ­ y me giro para darme unas nalgadas mientras me penetraba como perra por la espalda, despuĆ©s de hacerle su sumisa, se metiĆ³ al baƱo y Camila saliĆ³ con su cĆ”mara grabando, -¡Ya devuĆ©lveme mi cuerpo! –decĆ­a tratando de no gritar jadeando mientras ella me grababa, luego terminĆ³ de grabar y me quito el collar regresĆ”ndome a mi cuerpo, me vestĆ­ rĆ”pidamente y me aleje lo mĆ”s que pude hasta salir y regresar a mi casa, luego de pensarlo un poco creo que no estarĆ­a tan mal visitar a la vecina de vez en cuando.



3 comentarios:

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