𝑼𝒏𝒂 𝒍𝒆𝒄𝒄𝒊𝒐𝒏 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒔𝒖 𝒉𝒊𝒋𝒂

 

Camila estaba desesperada, su madre había intercambiado su cuerpo con el de un vago de la calle y este llevaba varias horas sin aparecer, además, su madre la trataba como el vagabundo que ahora era y le impedía entrar a la casa incluso amenazándola de llamar a la policía como si fuera un vagabundo cualquiera.

- ¡Mama, por favor, ya devuélveme mi cuerpo!, además, ese tipo tiene mi cuerpo, seguramente se está manoseando, puede estarse drogando o quien sabe que, haciendo con mi cuerpo, ¿No te da miedo que podría hacerle al cuerpo de tu hija? –Camila lloraba –

- ¡No me importa!, al fin y al cabo, es un regalo para su vida, ahora que tiene una verdadera oportunidad de vivir una nueva juventud, así como tu no quisiste aprovecharla, si él no la aprovecha es su decisión, no la mía ni la tuya –

- ¡Pero mama, esto no es justo!, yo no soy un hombre viejo y vago, soy tu hija, y le diste mi cuerpo a un vagabundo –

- ¡Pues tu ya no eres mi hija, ahora tu eres un vagabundo y si no te vas llamaré a la policía! –

Todo fue a causa de que Camila era una chica fácil, que quería tenerlo todo sin esforzarse, se la pasaba de fiesta en fiesta y no era responsable con la escuela, incluso, parecía que vendía fotos suyas con tal de ganar dinero fácil, eso a su madre le molesto bastante y ya que ni ayudarle en los deberes de la casa quería, decidió darle una lección que no importaba que tan cruel fuera, incluso si perdía a su hija en todos los sentidos.

Horas después, cerca de la madrugada, el sujeto regreso con el cuerpo de Camila y esta lo miro sorprendida de ver que estaba bastante bien vestida, parecía una linda señorita y como una buena colegiala, le traía buenas calificaciones a su madre, este solo le sonrió y con perversión le mostro sus tetas apachurrándolas con sus nuevas finas manos, le mostro la hoja con sus dieces y con sorpresa su nueva madre salió para felicitar que había logrado una buena acción ayudando al indigente para ser su nueva y bien portada hija, para su madre, no le importaba si su nueva hija se masturbaba, con tal de que su vida no se desaprovechara por una vida fácil como la que la verdadera Camila pretendía tener.