Javier era un hombre 62 aƱos de edad, el estaba en la cĆ”rcel por ser narcomeriudista y por otros delitos relacionados con las drogas; fue sentenciado a 40 aƱos de cĆ”rcel, de los cuales llevaba solo 4 aƱos. El ambiente en la cĆ”rcel era hostil ya que habia miembros de otros carteles rivales, el ya habia sufrido las consecuencias de eso, un dĆa mientras caminaba en el patio de la cĆ”rcel. fue acuchillado por la espalda varias veces dejĆ”ndolo gravemente herido, por suerte fue llevado de emergencia al hospital.
En el momento caos universal el estaba leyendo un libro dentro de su celda, cuando fue avisado por los guardias de seguridad que ya era hora de comer, un guardia le estaba abriendo la celda cuando de la nada cae al suelo inconsiete, Javier dice extraƱado
-¿Ahora que le paso a este?
-Ahora que se meteria a este?
Decide ayudarlo, para quedar bien con los guardias y asĆ limar los roces que tenia con estos, antes de pararse a ayudar al guardia, se pone a pensar:
-Que tal y si me culpa a mi que yo fui que lo deje inconsiente.
-Pensandolo bien, mejor me voy antes de que alguien me vea y me eche la culpa.
Se para de su asiento y se comienza a caminar con direccion a la salida de su celda, pasa a un lado de el guardia y le da unas pataditas para ver si ya habia desperado, pero no obtuvo respuesta alguna. Cuandp sale de su celda voltea a todas partes, para ver si no habia nadie viendo, pero se da cuenta que todos los guardias y reclusos estaba tirados inconsientes en el piso.
Javier aprovecharia esta oportunidad, ni siquiera lo penso ni un minuto, era el mejor momento, para escaparse de la cĆ”rcel, empieza a correr con direcciĆ³n a la salida de la cĆ”rcel, pero se tenia que fijar en no caerse con los cuerpos tirados en el suelo; Javier era el unico despierto en esa cĆ”rcel, pues paso en un punto de control lleno de guardia y nadie estaba despierto, siguio corriendo, todo estaba en silencio, la salida estaba cercas ya la podia mirar nada podria detener a Javier en su huida; aunos metros de la salida mienras iba corriendo Javier, su corazĆ³n palpitaba muy rapido, sentia que se le iba a salir, en eso siente un dolor en el pecho, no le dio importancia y siguio corriendo, hasta que ese dolor lo tiro al suelo junto con el mar de cuerpos, su cuerpo no aguanto mas, era como si le estuviera dando un ataque al corazĆ³n, antes de caer inconsiente en el suelo, exactamente cuando iba cayendo todo el lo veia gris y con sus ultimas fuerzas rio y maldijo la suerte que tenia; cayendo al suelo y dejando un silencio perpetuo en la cĆ”rcel.
Cuando despertĆ³ abriĆ³ sus ojos y miro vio que estaba en una habitacion que no conocia, pero al mismo tiempo se dio cuenta que no estaba en su celda, miro que estaba acostado en una cama y en el frente de esta habia un espejo, se para de la cama y va camindo al espejo, cuando llega se mira y vee que su reflejaba no era el sino una mujer, sacado de onda comienza a moverse y ve como su reflejo repetia tod los movimientos que hacia; se preguntĆ³ a el mismo:
-¿Ahora que paso?.
-Yo recuerdo que estaba por escaparme de la cĆ”rcel y me dio un infartonada despertĆ© aqui. -¿Como llegue -¿Si me escape sin darme cuenta?
-¿Tal vez mori y ya volvi a nacer?
Mientras trataba de poder encontrar logica a todo esto, es interrumpido por un celular que estaba sonando, alguien estaba llamando y tal vez le podia dar la raĆ³n a todo esto, el celular sonaba een la cama, Javier corriendo a verlo y ve que estaba llamando alguien, la pantalla solo decia "Mi amor", contesta y alguien le responde:
-Bueno, Raul.
-Raul dime que eres tu, por favor.
El tiempo le paso lento a Javier mientras se quedo pensando ¿que deberia contestarle?, contestarle y decirle quien es en realidad, con la posibilidad de regresar a la cĆ”rcel o contestarle lo que quiere la voz extraƱa, aunque todo esto es extraƱo, pero el estaba afuera de la cĆ”rcel; el siente que si dice la verdad, el volveria a la cĆ”rcel, asĆ que responde rĆ”pido y no trata de no levantar sospecha:
-Si, soy Raul
la voz emocianda le contesta:
-Soy Alejandra.
-Ya viste lo que paso, millones de personas intercambiaron cuerpos alrededor.
-Lo estan pasando en todos los anales de televisĆ³n.
Javiier le responde dandole por su lado:
-¡Que horror!
Alejandra feliz le contesta:-
-Habiendo millones de cuerpo en este mundo, tu y yo intercambiamos cuerpos mi amor.
Javier le responde un poco confudido:
-Si que suerte tenemos .
Alejandra le responde:
- Voy por halla, no te muevas.
-Vamos a estar dos juntos, hasta que resulta todo esto.
-No creo que vayamos a trabajar con todo este caos.
Raul y Alejandra trabajaban en un hospital pĆŗblico, Alejandra como enfermera y Raul como mĆ©dico cardiĆ³logo, ellos se conocieron cuando Alejandra entro a trabajar al hospital, a ella le toco la Ć”rea de cardilogĆa, los dos se empezaron a hablar y vieron que entre los dos hubo mucha quimica, y los dos espues de llevar un tiempo saliendo empezaron una relaciĆ³n.
Javier le responde:
-Si, aqui te espero.
Alejandra le pregunta:
-¿Ya tocaste mi cuerpo?
-No te estoy regaƱando, solo te estoy preguntando.
Javier, le responde con una cara de extraƱo:
-No, todavĆa no.
Alejandra riendo responde:
-Mentiroso, eso no te creo, menos tu
-Jajajajaja, yo si.
-Yo me estaba poniendo guapa, porque me dijiste que me ibas a venir.
-¿No te gusta como me estaba arreglando?
Javier responde y observa su nuevo cuerpo:
-Si, te ves muy bien.
-Va a sonar raro, pero no te excita esto.
-¿No te emociona pensar que se sentiria tener sexo en esta situaciĆ³n?
-Tu como hombre dentro en el cuerpo de una mujer y yo como mujer en el cuerpo de un hombre.
-Siempre quise saber que se siente penetrar a alguien.
-Tu nunca te has preguntado que siente una mujer cuando tiene sexo.
-No lo quieres experimentar
Javier todo confudido responde:
- No crees que es un poco rapido
-Apenas llevamos unas horas en el cuerpo del otro y tu ya quieres tener sexo.
Alejandra le contesta rapidamente:
-Pero si eso ibamos a hacer.
-Me extraƱa de ti si eres bien cochinote.
-Va a hacer una experiencia unica, cuando se va a repetir esto, yo digo que hay que aprovecharlo.
Javier tratando de no levantar ni la minima sospecha, Javier se muerde el labio, y no sabe que contestarle, empieza a recorda todo lo feo quuue vivio en la carcel, pues no tenia opciĆ³n, si eso tenia que hacer para estar en libertad, lo aceptaria.
Javier responde:
-Si, esta bien si tanto insistes.
Alejandra emocionada responde:
- ¡Que bien mi amor! vas a ver que a los dos nos va a gustar
Javier un poco molesto responde:
-Si, jajajajaja.
Javier mientras pensaba en su mente:
-Pinche vieja.
Alejandra le pregunta:
-Oye mi amor no me puede enviar una foto bien sexy jajaja.
-Es que desde ya un rato me estoy tocando el pene
-Y quiero sentir que se siente los hombres cuando se masturban.
Javier con cara de asco responde:
-Si claro mi amor, ahorita te la envio
Alejandra le cuelga.
Javier dice enojado:
-Como chingas cabrona
-Todo lo que tengo que hacer para que no me descubran.
Javier se baja la blusa que tenia puesto y se quita el sostƩn, ve por primera vez su pechos, los toca rapidamente, se acuesta en la cama y se toma una foto enseƱando sus pechos, se lo envia alejandra, y este le contesta por mensaje:
-Todo eso te cargas Raul jajaja.
-Jajajaja, que raro es masturbarse con una foto de mi propio cuerpo, ¿no crees?
-¿Tu no quieres que te mande una foto de mi pene cuando me venga?
Javier con cara de asco le responde:
-No, gracias, mejor me espero cuando llegues.
-No hay que comer ansias.
Alejandra mientras se masturbaba con una voz entre cortada le responde:
-Vas a ver que estoy nunca lo vamos a olvidar.
-Vamos a hacer de todo chiquita.
-Te voy a hacer a sentir mujer.
Javier no respondio nada y se dijo a si mismo riendo nerviosamente:
-Ni modo, asĆ es la vida.
-Primero estas tranquilo en tu celda leyendo un libro, un momento despuƩs despiertas en un cuarto que no es tuyo, con un cuerpos que no es el tuyo y ahora hay una tipa rara que me quiere coger, jajajaja.
-AsĆ pasa cuando sucede.
Excelente, siempre soprendiendo!
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