"Recuerden comentar en la parte de abajo para ganarse sus 10 puntos, sin olvidar de comentar con un alias o su nombre para poder registrarlos gracias"
"¡UNETE A MI PATREON!"
Este año seguimos con la saga de "Noche de Brujas"
-¡Noche de Brujas!-
III
-El Orfanato-
-Pt 1-
-Pt 1-
Xavi
estaba desconcertado, hasta hace unos momentos se encontraba mirando por el pasillo
una sombrea muy tenue de un niño, lo recordaba bien pues desde que había
llegado al convento temporalmente había sido seguido por ese extraño niño, la
monja le había dicho que no se preocupara, que el como tantos otros foráneos
que llegaban hasta aquí les pasaba lo mismo, se encariñaban con un niño, no
todos venían por gusto para adoptar a uno de ellos, pero siempre por lo regular
un niño salía de aquí con la sonrisa más grande y alegre que un niño pudiera
expresar en su rostro, luego de contarle algunas cuantas cosas sobre el
paradero final del niño antes de entrar al convento, Xavi se sentía deprimido,
ahora solo pensaba en salvar al niño, pero el si bien, solo era un simple escritor
buscando inspiración, había caído en ese lugar solo por que se extravió en el
camino, él se dirigía a Barcelona terminando por desviarse en dirección a uno
de los pueblos de las afueras de la gran ciudad, aunque extrañado por
encontrarse con solo un convento y una casa en un lugar tan abandonado por
muchas otras construcciones de madera podridas y por si fuera poco abandonadas,
solo se hallaba eso, pero más que nada parecía ser un lugar tranquilo, peor que
en ocasiones por al menos las primeras dos noches que se había hospedad ahí,
Xavi había sentido pánico, algo que por las noches al dormir en su cama pasajera
le molestaba, un llanto se escuchaba mientras que pies de niños se escuchaban
correr, en otras ocasiones también escuchaba sonidos extraños como de batalla
de guerras a los que la monja argumentaba que eran por simple coincidencia pues
a veces los niños encendían la tele o jugaban con sus juguetes imitando armas
etc.
Xavi
camino por última vez por los pasillos de convento, miraba asombrado un letrero
de madera podrido gigante pero que aún tenía un poco de claridad en sus letras,
“Orfanato Cataluña”, si bien el convento había sido transformado en un orfanato
luego de la segunda guerra mundial, todo parcia indicar que se encontraba en un
lugar histórico, pero aun no podía creer que esto siguiera en pie, de donde
obtenían los niños esta mujer preguntaba a sí mismo, quería pruebas, pues
quizás se encontraba con un gran hallazgo, si no es que la cumbre de sus
inspiraciones, ahora mismo quería escribir y pensar mas allá, debía interrogar
a la monja, pero cuando regreso corriendo dándole la vuelta al convento,
parecía que la edificación se desmoronaba mientras intentaba llegar a la entrada, Xavi lo noto de inmediato
deteniéndose, dio unos pasos hacia atrás chocando con el frente de su auto el
cual había dejado estacionado, -¡Mierda! –se alteraba, pronto, las sombras de
niños y por si
Laura
miraba una vez más por la ventana, el clima estaba fresco, pero ella estaba
inquieta, la idea de tener un hijo le rodaba la cabeza una y otra vez, la mujer de 29 suspiro, tomo su taza de café
dejándola en el lavabo mientras que escuchaba como su esposo abra la puerta,
Diego había llegado del trabajo el hombre de 34 años, este la encontró algo desanimada,
pero sabía que se traía entre manos, él no estaba aferrado a la pobre desgracia
que les había tocado como pareja pero entendía que los dedeos de su esposa por
ser madre cambian todo el panorama por completo, como le haría alguien como el
para poder animarla –pensaba, simplemente suspiro y giro luego de clocar sus cosas en el escritorio,
se acercó a ella para besarla y luego abrazarla, abrió su computadora y comenzó
a buscar opciones, era algo que no estaba muy a gusto pero si eso ayudaría a salvar
su matrimonio estaba dispuesto, si bien quería alguien de su propia sangre prefería
hacer las cosas de esta manera, comenzó
a buscar orfanatos disponibles hasta que ley una nota periodística que le
produjo algo de tristes, por alguna razón ambos giraron sus vistas para verse
el uno al otro, entendiendo a situación, Laura estaba feliz pues por fin su
esposo le ayudaría a tener un bebe o al menos a un niño en sus manos, la nota
decía, “Hogar dulce hogar, el pobre cementerio de niños que se hallaba a las
afueras de Barcelona, el convento de la madre María donde acuden los niños
desamparados, luchando desde la segunda guerra mundial” esto provocó en ellos interés,
era clara la respuesta de la mujer y Diego no pudo negarse, al menos los demás
orfanatos en la ciudad tienen mejores opciones para los niños de tal forma que
no les hiciera falta nada en los hogares de refugio en los que estaban, el
gobierno de la ciudad era estricto con ello, pero veían que aquel lugar no
contaba con todas las atenciones que los niños desearían.
El fin
de semana, Diego y Laura se armaron de valor y cogieron sus cosas para ir en camino
al lugar, -Solo serían tres días, pedí el lunes de descanso para regresar, si
te gusta uno comenzaremos el papeleo, Laura sonrió, mientras que ambos seguían su camino dejando la gran
ciudad de Barcelona, Diego condujo hasta las afueras les costó trabajo encontrar
el lugar pues la carretera estaba casi hecha un desierto, frente a ellos un
carro se acercaba desviándose justo cuando ellos comenzaron a desviarse encontrando
una especie de salida, a lo que los
pasajeros de enfrente pensaron que era la salida a un lugar paradisiaco pues
habían escuchado hablar sobre un lugar secreto a las afueras de Barcelona, casi
siempre así era como o caían en este lugar varias personas mas que por la acogida de un niño, Laura comenzó a ver la
avenida, todo parecía de un corte torrencial, estando casi seco desde la tierra
hasta las plantas, parecía no tener vida
el lugar, había escuchado de que existían lugares de pueblos abandonados pero
este no podría ser el que albergara un convento con niños, pensaba para sí
misma mientras que seguían, cuando en eso, noto una sombra escondida de uno de
los arbustos secos, la imagen de un niño casi traslucido asombro su visión,
este le saludaba mientras que se fugaba tratando de esconderse, ella trato casi
de detener el carro asustando a Diego quien no paro por prudencia pero tranquilizó
las intenciones de su esposa, más adelante notaban como la otra pareja seguía
su camino pensando que estaban en el lugar correcto, pronto noto a lo lejos una
especie de edificio medieval como los antiguo la cual se estaba acercando, al
llegar Diego rodeo una fuente grande que parecía estar seca siguiendo el
recorrido hasta la entrada del convento, este lucia abandonado no obstante de
otros lugares pequeñas cerca que se notaban abandonados, pensaban en que haría
un lugar así en medio de la nada, más si es que tenía niños dentro viviendo
intentando salvar sus vida, aunque notaban un auto semi nuevo justo en la
entrada, pronto desde la puerta se escuchaban algunos gritos, muchos de ellos de lamentos, pronto,
una mujer muy tractiva salía del lugar, bajando las escaleras alterada casi
como si quisiera escapar lo más rápido posible, detrás de ella un niño intentaba
seguirla, este se miraba aterrado con los ojos llorosos el aire estaba turbio y
el ambiente se sentía pesado, pronto la mujer subió a su auto arrancando tan
rápido como podía dejando todo atrás,
cruzo a un lado de los otros dos autos mirando a cada uno de los individuos
con cautela, la mujer parecía incomoda y nada acoplada a su entorno, ambas
parejas la miraron igual de comisionados, Laura se quedó mirando atreves de sus
ojos, parecían llenos de ira y de una tristeza muy profunda, como si algo la
hiciera huir de ese lugar, se quedó mirando como ida en el espacio un tiempo
considerable y pronto algo le llamo la atención desde lo lejos en el frente del
convento, miraba como un niño era casi pulverizado por el sol, se estaba
desintegrando mientras que su rosto parecía deformarse, su boca aun algo lejos
de una mejor definición visual, parecía estarse pegando labio con labio hasta
desaparecer por completo y dejar solo una pequeña marca de que alguna vez tuvo
boca, donde parecía ya no haber una, detrás del niño, una sombra negra parecía
absorberlo de regreso al lugar, Laura estaba conmocionada pero pronto el
ambiente se tranquilizó, Diego llego por fin al lugar detuvo su auto justo
detrás de ellos, estacionaron sus coches
y salieron ambos de sus carros, la pareja se miraba con la otra
confundida intentando no mostrar enemistad, pensaban que estaban en el lugar
correcto del otro aunque la segunda pareja
ya no lo estaba tan segura de estar a donde deberían, pronto ambos
hombres comenzaron a hablar, -Hola que tal, me llamo Héctor, bien de paso con
mi esposa, me dicen que aquí es un lugar afrodisiaco , donde las personas se la
pasan bien un buen rato, si es que saben de lo que hablo –decía el sujeto
obstinado y orgulloso de sí mismo, ambos parecían ser una pareja de clase media,
aunque vestían muy a la moda, una clásica pareja de jóvenes que apenas terminaban
de casarse en plena juventud, -No, se equivocan, esto es un convento, un orfanato
para niños desamparados, ustedes de donde vienen –les decía Diego, -Nosotros
venimos de Sevilla, queríamos buscar un lugar para relajarnos, pero creo que
estamos en el lugar equivocado, esto parece un lugar abandonado, seguros que
están en donde piensan, no vieron como esa chica salió huyendo seguro alguien
intento robarle, debe de haber gente mala por aquí, mejor nos vamos, ¡Vámonos
Carmen regresa al auto! –le decía algo engreído-, -¡Esperen, esperen!, no se
vayan –decía una dulce mujer saliendo tratando de bajar las escaleras, Laura de
quedo pensativa tratando de analizar a la mujer, algo muy secreto escondía esa
mujer pensaba, -¡Hola que tal, es una gran alegría recibirlos, veo que ahora
vienen dos parejas bien decididas, por lo regular llega gente desconocida
pensando que esto es solo un ligar para vacacionistas, el gobierno no quiere
ayudarme, llevo a los tratando de salvar a mis niños –decía la mujer-, -¿Sus
niños? –preguntaba Laura-, -Si, mis niños, algunos casi bebe otros ya casi a
punto de convertirse en unos ángeles adolescentes –decía la mujer sonriente,
pronto un par de niños se asomaron a la ,puerta entre ellos estaba escondido
hasta el fondo el niño que había visto Laura, sus ojos parecían tristes, algo andaba
mal, se miraban muchos niños, algunos muy felices casi sedientos de conocer
gente nueva, de ver personas adultas que podrían ser sus padres, sus caras no cabían
de la felicidad, Laura se estremeció de ternura, al igual que Diego y Carmen,
mientras que Héctor solo se limitaba mostrar una mueca de alegría aunque algo
orgulloso aun, -Carmencita, nosotros no queremos hijos ahora, acuérdate, somos muy
jóvenes, además no venimos a eso, -decía Héctor a su esposa-, además perdóneme
¿madre?, -María para servirle –decía la mujer riendo tiernamente-, -Si, madre María
, o Sor María como le digan, nosotros queríamos un lugar para estar tranquilos
y vacacionar, no venimos por un niño, perdone la molestia pero nosotros nos
iremos de una vez –respondía el hombre altaneramente-, -¡Oh, no, no!, no se
preocupen, siempre viene gente perdida a este lugar, no encuentran la salida y
lo más fácil es quedarse o irse si es que tienen suerte claro –adulaba la mujer, los cuatro se
quedaron en silencio como si notaran algo extraño en la mujer, -¡Oh, Jajaja!,
es broma, para ser jóvenes no tiene sentido del humor, -Bueno, em, ya tenemos
que irnos es mejor, -No, no esperen,
porque no se quedan aunque sea esta noche, ya está casi anocheciendo, seguro
que no quieren dormir y descansar de un largo viaje desde Sevilla, además tengo
agua fresca y pan recién horneado –decía la mujer esperanzada ante la felicidad
de sus visitas, -Esperen, no que no tenía
recursos –cuestionaba Laura-, -Oh, no para nada, pero el monasterio de Olivo me
ayuda, está un poco lejos de aquí, pero a veces me traen mis compañeros
sacerdotes algunas cosas, mi estufa es vieja pero aun calienta, además por un
refri no quiere decir que sea una millonaria
o si –respondía la madre-, -Bueno supongo que sí, -¡No esperemos más, pasen,
pasen, espero les gusten las pasas pues hice panque de pasas, esta muy rico y
suave, hice bastante para mis niños y para las visitas también, uno nunca sabe cuándo
vendrán las visitas seria descortés de mi parte no ofrecerles nada, los niños
necesitan atención –la madre se giraba en dirección a la puerta mientras que
los niños salían tranquilos pues el sol estaba casi oculto, tomaron las cosas
de las parejas y las llevaron a sus cuartos, Héctor aun aprecia algo molesto
por quedarse pero tenía razón, no le gustaba manejar de noche, era muy joven
para morir en un accidente en carretera
por absurdo que lo fuera, entraron siendo perseguidos por una fuerte oleada de
vientos rápidos que levantaban el ´polvo, la puerta se cerró de golpe detrás de
Héctor sonando muy recio asustando a los cuatro, Héctor se giró y pensó que
algo no terminaría bien de todo esto, lugar abandonado en medio de la nada,
castillo medieval, una madre sola con puros niños que parecían estar sucios
todo el tiempo, una mujer corriendo, nada parecía ser lo que se veía.
Desde ahora puedes darle me gusta a las publicaciones, aquí abajo encontraras las reacciones, espero tu reacción en la barra de abajo.
¡No olvides comentar y dar tu reacción en la parte de abajo!
-No es visible tu perfil o tu nombre solamente indicara un numero en el tablero no tu imagen pública-
-También puedes seguirme en la parte de más abajo si estas en modo móvil, si estas en tu computadora o en tableta en la barra lateral de tu derecha encontrarás los seguidores gracias-
-No es visible tu perfil o tu nombre solamente indicara un numero en el tablero no tu imagen pública-
-También puedes seguirme en la parte de más abajo si estas en modo móvil, si estas en tu computadora o en tableta en la barra lateral de tu derecha encontrarás los seguidores gracias-
Wow que nueva historia
ResponderBorrarSe ve que estara de poca madre (osea chingona xD)
ResponderBorrar