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Karina se encontraba saliendo de la
escuela, una chica tan linda y sonriente que no le hacia daño a nadie, paso sus
últimos días peleando con su novio por problemas personales, la chica sufría también
por la enfermedad de su dulce abuelita a quien quería mucho, la chica estaba
por tomar su autobús camino a casa
cuando una fuerza extraña comenzó a paralizarla, pronto la chica experimento un
escalofrío muy grande por todo su
cuerpo, sus piernas comenzaron a moverse caminando en otra dirección, sus manos
se dirigían a sus glúteos deslizando las yemas de sus dedos por debajo de la
falda sintiendo el rose de la tela de su panti apretando una de sus nalgas,
sentía terror a la vez que no lograba controlarse, una fuerza extraña la estaba
manipulando, cuando pronto sus manos automáticamente subieron a sus pechos
para estrujarlos, aunque apenas se estaban
desarrollando no limitaban el placer que sentía en ellos, la pobre chica
sollozaba dentro de sí misma por algo horrible que a estaba perturbando por
dentro y por fuera, la chica siguió caminando hasta llegar a una casa
extraña, ella quería llorar pero no podía,
por dentro el terror la carcomía, pronto su cuerpo se limitó a hacer esfuerzo
sentándose muy cómodamente en la cama del cuarto al que entro, comenzó a subir sus manos por todo su cuerpo
acariciando desde sus largas y suaves piernas hasta sus pechos y su rostro, se levantó
dejando sus cosas hasta llegar a un espejo donde comenzó a mirarse apreciando
su cuerpo de una forma extraña que jamás había hecho, sus ojos parecían abrirse
más de lo normal y su boca hacia una expresión malévola y perversa, tanto que
pronto tenía miedo hasta de sí misma, pronto la chica comenzó a quitarse su
vestimenta de colegiala, quedando en bragas para luego de tomarse unas fotos desnudarse
por completo, abrió un cajón del armario sacando un par de objetos punzantes, un
díldo y unas pinzas de metal pequeñas, se recostó en la cama abriendo las
piernas en posición, con sus dedos comenzó a jugar su vagina, la chica lloraba
internamente ante la desesperación, su vagina pronto despidió un fresco jugo vaginal
dejándola lista para ser penetrada, tomó el díldo introduciéndolo en su vagina
la cual aún era virgen, experimentando primero una sensación de dolor que poco
a poco fue liberando, entonces la chica comenzó a gemir, tomo sus pechos acariciándolos
y pasando sus dedos por sus pezones, tomo las pinzas metálicas pellizcando con
ambos sus pezones lo cual le causo más dolor que placer para el mismo, sujeto
el díldo chupando los líquidos que se habían impregnado en el, un poco de
sangre por la ruptura de la vagina pero nada grave por ahora, tomo uno de los
cuchillos que había sacado junto con un gancho, introdujo el chuchillo dentro
de su vagina cortando una línea filosa de la cual pronto salió sangre, el dolor
pronto sacudió su cuerpo, la chica estaba incontrolablemente desesperada,
mientras sufría por el dolor causado ante la cortada y las pinzas en su ser, sentía
el objeto filoso dentro de sí misma aun penetrando y rasgando, saco el cuchillo
e introdujo el gancho jalando hacia arriba intentando abrir un poco más la
vagina, luego introdujo un cilindro metálico más grande causándole dolor, la
chica se desmayó en su propia prisión mental,
no soportaba el daño que se estaba causando a sí misma, aunque su cuerpo siguió
introduciendo varias veces el objeto metálico, agarro con sus dedos algo de la
sangre chupándola con sus dedos uno a uno saboreando los placeres de su
perversión, la chica limpio todo el estropicio causado por la sangre, intentando
no caerse ante las grandes hemorragias causadas por ella misma, se colocó de
nuevo el uniforme y salió pasando desapercibida hasta llegar su casa cayendo
desmayada justo cuando su madre abrió la puerta al ver que su hija llegaba muy
tarde de la escuela, pero antes de si quiera poder abrazarla ella ya había
muerto luego de una tarde de placeres salvajes, -¿Por qué tan seria se decía a sí
misma la mente de su madre luego de notar que sostenía un cuchillo manchado de
sangre, ella sorprendida soltó el cuchillo cayendo en llanto mientras que el
Hopper salía de su cuerpo al terminar de dejar evidencia suficiente que no lo incriminara
haca una nueva víctima.
Se paso con lo del cuchillo 🔪
ResponderBorrarHay Dios
ResponderBorrarNo se que decir al respecto me dejo pasmada
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